Padres de California no podrán dejar de vacunar a sus hijos
La Asamblea de California aprueba una iniciativa para fomentar la vacunación infantil independientemente de las creencias de los padres
Los Ángeles – Luego de la propagación de sarampión en el parque Disneyland de California, las autoridades locales tomaron medidas.
La agencia EFE informó que la Cámara Baja californiana aprobó por mayoría simple el proyecto de ley SB 277 que limita el derecho de los padres a invocar razones personales para evitar que sus hijos reciban las vacunas prescritas por las autoridades médicas.
La medida ya obtuvo el visto bueno del Senado californiano en mayo y será revisada de nuevo por la Cámara Alta antes de ser enviada al gobernador Jerry Brown para su firma definitiva.
En caso de que se convierta en ley -todo apunta a que así será- California sería el trigésimo segundo estado en el país que pondría fin a la exención de vacunación por creencias personales.
Hasta ahora, los padres californianos pueden saltarse el calendario de vacunación de sus hijos si así lo consideran oportuno, aunque siempre después de recibir el asesoramiento de un doctor que les explique las consecuencias de su decisión.
La propuesta SB 277, que cuenta con un amplio respaldo de la comunidad médica, política y social, fue recibida también con críticas por parte de un creciente número de familias que desconfían de las vacunas por los potenciales efectos secundarios que pueden producir.
En California hay escuelas en las que un 30% de los alumnos, según datos del departamento estatal de Sanidad, no están vacunados por decisión de los padres, un porcentaje alarmante a ojos de las autoridades, ya que resta efectividad a los esfuerzos por mantener a raya la transmisión de virus.
Se considera que una comunidad está protegida contra una enfermedad cuando entre un 92 y un 95% de sus miembros está vacunado, esto genera la inmunización colectiva, es decir, que es altamente improbable que alguien se contagie incluso si no estuviera inmunizado.
Numerosos padres, entre ellos hispanos, se manifestaron en mayo en Anaheim donde se celebraba una convención estatal del Partido Demócrata para protestar por la propuesta para endurecer la regulación del uso de vacunas que fue presentada en febrero en el Senado de California por los demócratas Ben Allen y Richard Pan.
“Gracias a todos los padres y madres del movimiento (social) Vaccinate California que han hecho posible la SB 277. Las vacunas funcionan”, aseguró Pan, pediatra de formación, en su cuenta de Twitter.
Los impulsores de este proyecto de ley aseguran que lo que se busca es defender la salud pública mediante la protección de las tasas de vacunación.
La ley sólo se aplicaría a las vacunas actualmente en vigor y obligaría a los centros de primaria, secundaria y guarderías a exigir que todos sus alumnos estuvieran inmunizados para permitirles el acceso al centro. La medida no afectaría a los niños escolarizados en casa ni a aquellos exentos por razones médicas.
La SB 277 se creó en respuesta al brote de sarampión que se originó en el parque Disneyland de California a finales de 2014 y que se dio por terminado en abril tras afectar a 131 personas, muchas de las cuales no habían sido vacunadas contra este virus.