Víctima de masacre en San Bernardino salvó a una joven con su vida
Denise Peraza contó que su compañero de trabajo Shannon Johnson, la abrazó para que ella no fuera alcanzada por las balas
Una joven que sobrevivió al tiroteo masivo en San Bernardino reveló que uno de los 14 fallecidos la protegió con su cuerpo y le salvó la vida.
En un correo electrónico, Denise Peraza, de 27 años, contó que una de las víctimas de la masacre, su compañero de trabajo Shannon Johnson, la abrazó para que ella no fuera alcanzada por las balas.
La Policía ha dicho que los supuestos atacantes, Syed Rizwan Farrok y su esposa Tashfeen Malik, habrían efectuado entre 65 y 75 disparos con rifles semiautomáticos y pistolas en un salón del Inland Regional Center, donde se realizaba un banquete navideño. Fue una lluvia de balas y el saldo fue trágico.
Uno de esos proyectiles impactó la espalda baja de Johnson cuando éste cubría a Peraza.
“La mañana del miércoles a las 10:55 a.m. estábamos sentados uno junto al otro en una mesa, bromeando… nunca habría adivinado que tan sólo cinco minutos después estaríamos acurrucados bajo la misma mesa, usando una silla caída como escudo ante más de 60 balazos que se esparcían por toda la habitación”, relató Peraza en un comunicado que emitió.
Así, en medio del caos y del horror, Johnson, de 45 años, le decía a su compañera: “Te tengo”.
Peraza dijo que por siempre vivirá agradecida de este acto heroico.
“Creo que todavía estoy aquí por este hombre increíble. Este maravilloso y desinteresado hombre que siempre le sonreía a los demás en la oficina con sus animadas historias de su natal Georgia, que será profundamente extrañado por todos… mi amigo, mi héroe”, escribió ella.
Después de enterarse de este relato, la novia de Johnson, Mandy Pifer declaró al diario Los Ángeles Daily News: “Nadie está sorprendido […] Shannon estaría avergonzado por toda esta atención”.
Johnson, un inspector sanitario del condado de San Bernardino, vivía en Los Ángeles y la imagen suya más publicada es una que fue captada en el parque MacArthur.
El deseo de este héroe de la masacre de San Bernardino era ser sepultado en Georgia al lado de su padre. Sus amigos y familiares realizan una recaudación de fondos para cumplir su voluntad.