Falsificaban credenciales para entrar a puertos de Long Beach y San Pedro
Hay un mercado negro de credenciales para entrar a los puertos, afirma la Guardia Costera
Tres clientes se acercaron al sujeto apodado “Coy”, famoso en el swapmeet Alameda de Los Ángeles por vender todo tipo de documentos “chuecos”, incluso los que deben ser verificados por agentes federales.
Por eso “Coy”, cuyo nombre real es Ricardo Ríos-Gama, no se inquietó cuando le pidieron credenciales biométricas para entrar a zonas restringidas de los puertos de San Pedro y Long Beach, conocidas como Tarjeta de Identificación de Trabajadores del Transporte (TWIC) y que portan miles de camioneros.
Ríos-Gama fotografió a sus tres clientes y les cobró 130 dólares por cada TWIC “chueca”. Unos días después le pidieron elaborar otras credenciales incrustándoles un microchip y también las hizo.
El presunto falsificador, vecino de South Park y de 51 años, no sabía que se trataba de un operativo encubierto del Servicio de Investigación de la Guardia Costera que concluyó con su arresto el jueves 4 de febrero.
Un día antes detuvieron a Brian Alan Dunmore, un hombre de Porter Ranch que vendía equipo para elaborar documentos apócrifos, entre éstos tarjetas TWIC. Al catear su vivienda, las autoridades encontraron tres rifles de asalto (cuya portación es ilegal en California) y más de 2,000 municiones.
Ambos enfrentan cargos federales por estar implicados en el tráfico de documentos falsificados y si son encontrados culpables enfrentarían una condena de hasta 15 años en una prisión federal.
Este es el primer caso detectado desde que la Agencia de Seguridad en el Transporte (TSA) exigió en 2008 a choferes, contratistas y empleados del complejo portuario más grande del país, pasar por una revisión de antecedentes penales para obtener la tarjeta TWIC y acceder a las terminales marítimas.
Este proceso se implementó porque el complejo ha sido amenazado por grupos terroristas.
“Debido a que algunas personas no pueden obtener una credencial TWIC por la falta de un estatus migratorio y por otras razones se ha creado un mercado negro de estos documentos”, aseguró el Departamento de Justicia (DOJ), haciendo eco a la investigación de la Guardia Costera.
Hace unos años, entre los choferes del puerto, la gran mayoría inmigrantes latinos, corrió el rumor de que este requisito impediría que muchos cuyos permisos de trabajo habían expirado o que tenían procesos migratorios pendientes, pudieran recoger y entregar contenedores en las terminales.
Según autoridades, unos 10,000 camioneros poseen una tarjeta TWIC que les permite acceder al puerto de San Pedro y otros 14,000 la tienen para entrar al de Long Beach.
La administración del puerto angelino indicó que en los últimos años no han detectado a conductores con falsas credenciales. Ni TSA, ni la Guardia Costera precisaron cuántos casos han descubierto.
Grupos que representan a camioneros del puerto indicaron que no sabían de esta situación.
“Estamos agradecidos por el trabajo excepcional del equipo del Servicio de Investigación de la Guardia Costera que condujo a estos arrestos”, dijo Tom Gazsi, jefe de la Policía del puerto de San Pedro.
Esa corporación militar, que inició el operativo encubierto a finales de 2015, indicó que continuará persiguiendo “agresivamente” a quienes produzcan credenciales apócrifas para entrar a los puertos.
“La fraudulenta fabricación y venta de documentos oficiales de identificación requeridos para tener acceso a áreas restringidas pone en riesgo y socaba los esfuerzos para mantener la seguridad en nuestros puertos”, señaló Jon Finnegan, agente especial de la Guardia Costera.
Al complejo San Pedro-Long Beach llega la mayor cantidad de bienes importados en este país.