Latinos entre más propensos a perder la licencia de conducir
Estudio afirma que están siendo golpeados de una forma desproporcionada por las leyes estatales y por los procedimientos relacionados a las suspensiones
Los latinos y los afroamericanos son más propensos a perder su licencia de conducir por no pagar las multas y como consecuencia sufren más arrestos que los blancos por conducir sin licencia, señala un informe presentado por el Comité de Abogados de Derechos Civiles.
“Los californianos de bajos ingresos están siendo golpeados de una forma desproporcionada por las leyes estatales y los procedimientos relacionados a las suspensiones de licencia de conducir”, afirma el reporte titulado “No es sólo un problema de Ferguson”.
Los índices más altos de suspensión de licencias de conducir en 2014 “se encontraron en vecindarios pobres con mayoría de habitantes latinos y afroamericanos”, señala.
Por ejemplo, en el código postal 90011 de Los Ángeles, donde más del 90% de sus residentes es hispano y el índice de pobreza es de 44%, el índice de licencias suspendidas es de 4%.
Mientras que en el código postal 90025 de Santa Mónica, donde el 54% de sus residentes es blanco no hispano y el índice de pobreza es de 8.3%, el índice de licencias suspendidas es tan solo de 0.9%.
El análisis resalta que hay más de 4 millones de licencias de conducir suspendidas en California y los conductores deben más de 10,000 millones de dólares por multas de tráfico y cargos por atraso en el pago.
El análisis indica que una de las razones es que el costo de las multas de tráfico se disparó ostensiblemente en los pasados años.
“En las últimas décadas las multas y los costos asociados con citaciones de tráfico se han incrementado permanentemente. Lo que acostumbraba a ser una violación de 100 dólares ahora cuesta cerca de 500 y llega a más de 800 si la persona no cumple el primer plazo de pago”, señala el informe .
Más recursos
Según el estudio, esta situación genera sobrecostos para el Departamento de Vehículos Motorizados (DMV) de California que tiene que destinar recursos para los procesos de suspensión de licencias, así como para los empleadores que deben contratar a otra persona y entrenarla cuando uno de sus empleados se queda sin licencia de conducir y la necesita para su trabajo.
El informe presentado destaca el caso de “María” quien “perdió su trabajo de entrenamiento en construcción ambiental” porque su licencia estaba suspendida por multas sin pagar y no podía usar su vehículo entre los lugares que su trabajo exigía.
“Con dos niños y sin trabajo ni ahorros, ella no puede pagar la deuda”, destaca la investigación señalando que, por estar referida a una agencia de cobro, tampoco podía tratar de pagar sus multas con trabajo comunitario.
Debido a la falta de la licencia según argumenta el estudio, muchas personas no consiguen trabajo por lo que tienen que depender de las ayudas del estado, lo que representa una carga adicional para el gobierno y los contribuyentes.
Además de una amnistía de las deudas y de rebajar el valor de las multas en un 50%, el análisis propone que se elimine el no pagar las multas como causa para sus suspender la licencia de conducir y que se le permita, a quien tiene deudas de tráfico, trabajar para pagarlas.
El informe analizó los datos del DMV, así como casos de las distintas cortes de tránsito que operan en el estado.