Mauro Icardi, el ‘roba novias’ que divide a Argentina
La discusión aumenta ante la posibilidad de ver al polémico Icardi, goleador y capitán del Inter de Milán, convocado para la reanudación de las eliminatorias sudamericanas
Mauro Icardi posee la bendición de los dioses del deporte. El delantero argentino cumplirá 24 años el próximo domingo y con esa edad ya es capitán y un histórico del Inter de Milán, uno de los equipos de mayor abolengo en el mundo del balompié.
Dentro del campo todo lo hace bien: es veloz, tiene potencia, regate, inteligencia y frente a gol suele ser letal. Vaya, es un crack al cual el Inter protegió el año anterior con una extensión de contrato hasta el año 2021 y una mareante cláusula de rescisión de 125 millones de dólares; sin embargo, en la selección de Argentina, donde Gonzalo Higuaín y Sergio “Kun” Agüero no han logrado brillar, sólo ha sido convocado en una ocasión y jugado 10 minutos.
En el fútbol profesional más allá de las cualidades y la popularidad hay un elemento de peso por el cual se explican situaciones como la de Icardi: se trata de los códigos internos y ahí el brillante delantero del Inter protagonizó una historia que no sólo puso de cabeza al vestuario nerazzurri, sino también al fútbol argentino en su conjunto.
Corría el año 2012 y Mauro Icardi se reencontraba en la Sampdoria con Maxi López, futbolista también argentino a quien conoció en el Barcelona, en cuyas fuerzas básicas jugó el hoy capitán del Inter.
Amigos inseparables, los futbolistas comenzaron a llevar una vida en común. Maxi abrió las puertas de su hogar a Icardi, quien muy pronto era un miembro más de la familia conformada por Maxi, su esposa, la modelo argentina Wanda Nara, y sus tres hijos. Todo era perfecto, hasta el último día de octubre de 2013.
Wanda Nara escribió en Twitter lo siguiente: “Basta para mí”. Pocos entendían ese día que aquel mensaje era el inicio de una de las más grandes historias para la prensa del corazón, que se dio el banquete de su vida con la cobertura de una trama cuyo desarrollo corrió como fuego en campo seco por el citado servicio de microblogging, a través de la cual el 19 de noviembre Icardi y ella se declaraban su amor.
La nitroglicerina estalló: el para entonces ya refuerzo de lujo del Inter de Milán, el mismo niño que años atrás en Barcelona se acercó con timidez a Maxi López a pedir un autógrafo, le “robó” la esposa a su amigo y, además, alardeaba de ello tanto en pláticas informales como en las propias redes sociales. Icardi había roto quizá el más sagrado de los códigos, no sólo de vestuario, sino de cualquier amistad.
Las condenas llegaron cual flechas en tiempos medievales. Llovían juicios de valor contra la nueva pareja, que hoy trabaja en conjunto (Wanda Nara es la representante de Icardi) y que ya forma una familia luego del nacimiento de su pequeña hija.
López, de 32 años y actual delantero del Torino italiano, nunca logró ser convocado al seleccionado mayor argentino, sin embargo, la repercusión de lo ocurrido con quien fuera su amigo tuvo una onda expansiva que provocó muchos apoyos dentro de la Albiceleste para él, al grado de que Icardi, quien futbolísticamente tiene todo para triunfar con Argentina, nunca fue llamado por Gerardo “El Tata” Martino y sólo fue convocado en una ocasión por el exestratega Alejandro Sabella.
Opiniones divididas
Argentina ocupa el quinto lugar en la eliminatoria sudamericana rumbo al Mundial de Rusia 2018, lo cual la deja por ahora sin boleto directo, aunque con la posibilidad de jugar una repesca ante el mejor de Oceanía.
La ronda clasificatoria se reanuda para la Albiceleste el 23 de marzo con un importante partido en el estadio Monumental de River Plate frente a Chile, que marcha en la cuarta posición un punto por encima de Argentina, justo en la última plaza que otorga el pase directo a la Copa del Mundo.
En Argentina creen que el momento de Icardi ha llegado. El goleador demuestra semana a semana su innegable valor con el Inter, donde a mitad de temporada y por tercer año en fila suma 15 goles (nadie lo había hecho) en 20 partidos y goza del gafete de capitán al erigirse como la mayor figura de la plantilla.
Además, la afición sudamericana no confía más en Gonzalo Higuaín, a quien pese a firmar también una temporada de almanaque (suma igualmente 15 goles con la Juventus), no le perdonan sus yerros frente a gol en la final de 2014 y las últimas dos Copa América que Argentina perdió en penaltis frente a Chile.
Edgardo Bauza, estratega de la Albiceleste ya estuvo en Italia para observar a Icardi. “Le ha dado placer a él y a todos nosotros”, dijo Stefano Pioli, entrenador del Inter respecto a la visita de su colega argentino.
Bauza, según la prensa de su país, ya ha sondeado con los pesos fuertes de la selección (Messi, Mascherano y Romero) la posible inclusión de Icardi y por ello “El Patón” ya tiende una mano al extravagante delantero: “Icardi es un jugador convocable. En este momento Higuaín y (Lucas) Pratto (Sao Paulo) son los dos centros delanteros, pero el tercero es Icardi”, dijo Bauza a la cadena Fox Sports.
Como era previsible, la visita de Bauza a Icardi levantó polvo en Argentina, donde Diego Armando Maradona, todo un ortodoxo consumado en lo referente a los códigos entre futbolistas y el vestuario, explotó contra el seleccionador. “Si Bauza se reunió con Icardi me parece que es tan traidor como él”, le dijo a ESPN y añadió que prefería reservarse su opinión sobre la posible convocatoria del ariete de casi 24 años.
La voz de Kempes
Sin embargo, hay voces contrarias, como la del también estelar Mario Kempes, campeón del mundo en 1978 bajo la batuta de César Luis Menotti, quien pide separar la labor de cancha de lo extrafutbolístico. “Icardi ya desde hace tiempo debe estar en la selección. Higuaín anda muy bien, pero en la Juventus; no está convirtiendo para Argentina. Otro caso es el del ‘Kun’ Agüero, que no está teniendo un buen presente (ha sido dejado en la grada por Guardiola en Manchester City)”, dijo Kempes para ESPN Radio en Argentina.
Para el “Matador”, no es correcto someter la posibilidad de convocar o no a un futbolista, más si éste atraviesa un momento dulce como ocurre con Icardi, al juicio de una plantilla, como se dice ocurre en Argentina, donde se rumora que el propio Messi vetó a Icardi por “roba novias”. “Yo creo que los jugadores de la selección no deben opinar quién juega y quién no. Al menos en mi época era así. Hoy parece que son ellos los que deciden el plantel”.
El futuro de Icardi, quien ya rechazó jugar para Italia porque desea vestir la playera de su país natal, cada vez parece más cercano a la Albiceleste, casaca que seguramente no le pesará, porque si algo ha demostrado este joven es temple y carácter, como cuando los hinchas radicales del Inter le declararon la guerra al acusarlo de infame por el escándalo con Wanda y Maxi y él respondió que estaba dispuesto a “traer a un centenar de criminales argentinos y matarlos a todos los ultras”.
Como sea y mientras su llamado a la selección argentina llega, Mauro y Wanda mantienen su vida de glamour y excentricidades, como demuestra su esposa en redes sociales al subir una imagen de Icardi dentro de su nueva camioneta Hummer dorada (con valor superior a los 117,0000 dólares), con las iniciales de la pareja en el respaldo para cabezas de los asientos delanteros, jugando Play Station y el comentario de “él me espera así”.