Maestros ‘DACAmentados’ aguardan con miedo anuncio de Trump sobre DACA
La deportación de estudiantes y maestros "DACAmentados" eliminaría al menos $433,400 millones del PIB de EEUU de forma cumulativa en una década
WASHINGTON.- Centenares de maestros “DACAmentados”, como el mexicano José González, trabajan en aulas en todo EEUU y, al igual que muchos jóvenes, también temen la deportación mientras esperan la decisión de la Administración Trump sobre el futuro del programa de “acción diferida” (DACA) de 2012.
En medio del clima de hostilidad que se percibe en la comunidad inmigrante por la ampliación de las redadas de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE), los padres de familia buscan apoyo en los maestros y demás autoridades escolares.
Sin embargo, en el caso de los maestros amparados al DACA de 2012, éstos también están registrando altos niveles de ansiedad, porque, de un solo plumazo, la Casa Blanca puede derrumbar sus planes de vida.
El presidente Donald Trump dijo ayer, en su primera rueda de prensa por sí solo, que la solución al futuro de DACA es un asunto complicado, aunque prometió tratarlo “con el corazón”.
El DACA “es un asunto muy, muy difícil para mi. Es uno de los asuntos más difíciles que tengo porque tienes a estos chicos increíbles”, explicó Trump, quien afronta presiones de grupos anti-inmigrantes que contribuyeron a su victoria en 2016.
Trump promises to "show great heart" for those with #DACA. @joseiswriting asks if his deportation force will truly live up to that promise. pic.twitter.com/p4gtfs3rpY
— Define American (@DefineAmerican) February 17, 2017
Sus palabras han generado mucha expectativa, especialmente porque durante la contienda electoral prometió que eliminaría el DACA, que ha protegido de la deportación a unos 750,000 inmigrantes indocumentados.
El DACA, adoptado por la Administración Obama ante la ausencia de una reforma migratoria, permite que los beneficiarios obtengan un permiso de trabajo, y licencias de conducir en los estados que así lo autoricen.
Con ese permiso temporal, los jóvenes pueden acceder a una educación universitaria, y centenares de maestros “DACAmentados” han encontrado empleo en las aulas en distritos escolares en estados como California, Colorado, Nueva York y Texas.
González forma parte de un grupo de 136 maestros “DACAmentados” inscritos en el programa sin fines de lucro “Teach for America” (TFA), que desde 2013 ha aceptado a maestros “DACAmentados” y los ha desplegado a escuelas en once estados.
González, de 23 años, se graduó de la Facultad de Negocios de la Universidad de Pensilvania y trabaja como maestro de matemáticas en la escuela “Community Charter Middle School” en Los Angeles (California). En agosto de 2016, González fue homenajeado en la Casa Blanca por su labor con la comunidad inmigrante.
En declaraciones a la revista “EdWeek”, González ironizó que podría pasar de homenajeado a ser víctima de la deportación, tomando en cuenta las órdenes ejecutivas migratorias que emitió Trump el mes pasado y que facilitan la deportación masiva.
“Es como si ser homenajeado por la Casa Blanca fuese alguna broma. Se siente como una bofetada”, dijo González, quien emigró con su familia a California cuando tenía dos años de edad.
La TFA, que ya ha aceptado en su programa a otros 40 maestros “DACAmentados” para el próximo año escolar, dijo que está ofreciendo asistencia legal gratuita a todos sus miembros, incluso ayudándoles en casos en los que puedan realizar un ajuste migratorio.
“Estamos dando asistencia legal y fondos para una mudanza si hay maestros que necesitan regresar a casa o estar más cerca de sus familias”, explicó a este diario Kathryn Phillips, portavoz de la TFA.
“Los estudiantes están expresando mucho miedo. Muchos de nuestros estudiantes tienen al menos un padre indocumentado, y tienen miedo de ser separados de sus familias, de quedarse acá huérfanos, o terminar en un hogar de crianza (“foster care”)“, señaló Phillips.
Por ello, los maestros de TFA están repartiendo materiales a los estudiantes y sus familias para que “conozcan sus derechos”, y para ayudarles a mantener la integración familiar, afirmó.
Sindicatos contra Trump
Activistas comunitarios han denunciado que agentes de ICE han realizado redadas cerca de zonas escolares, o incluso han seguido a buses escolares en busca de inmigrantes indocumentados.
Cerca de 2,000 superintendentes y demás autoridades escolares han firmado una petición en línea contra las acciones policiales, al señalar que éstas afectan el bienestar y la estabilidad de los estudiantes y sus familias.
En un comunicado conjunto, la Asociación Nacional de Educación (NEA) y la Asociación Estatal de Maestros de Texas, dos sindicatos de docentes, advirtieron recientemente que, ante el miedo a la deportación y la separación de familias, algunos padres de familia temen enviar a sus hijos a las escuelas.
“Los niños tienen miedo de ir al colegio, y los padres intentan desesperadamente encontrar a quienes les cuiden a sus hijos si son detenidos o deportados… esta vez está ocurriendo a altas horas de la noche, o cuando los estudiantes abordan autobuses para ir a la escuela”, indicaron.
The ICE raids are beyond reprehensible, they are inhumane. They threaten our students, their families. We will not stay silent. #HereToStay
— Lily Eskelsen García (@LilytheTeacher) February 11, 2017
Our students are collateral damage of ICE raids. Our schools will remain safe zones. All students are welcome. @NoelCandelaria #HereToStay
— Lily Eskelsen García (@LilytheTeacher) February 11, 2017
Un problema grave, según los maestros, es que estas redadas ahora están ocurriendo “sin ninguna supervisión, revisión, o debido proceso”, lo que estaría violando los derechos civiles de las personas.
“Le pedimos a la Administración Trump y a ICE que pongan un fin de inmediato a estas redadas en nuestras comunidades”, puntualizaron.
Según un análisis del Centro para el Progreso Estadounidense (CAP), tomando en cuenta sus contribuciones a la economía, la deportación de estudiantes y maestros “DACAmentados” eliminaría al menos $433,400 millones del Producto Interno Bruto de EEUU de forma cumulativa en una década.