México trabaja “plan B”, no descarta que EEUU salga del TLCAN
Trabajará a la par la consolidación de más acuerdos comerciales con Europa y Asia, destacó el gobierno mexicano
México se prepara para la negociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, (TLCAN) pero no descarta que el presidente Donald Trump saque a Estados Unidos del acuerdo comercial, por lo que trabaja en una “agenda comercial” para diversificar el comercio antes esta posibilidad, informó la Secretaría de Economía (SE).
“No es posible descartar que Estados Unidos decida dejar de ser parte del TLCAN. Si esto sucediera el tratado continuaría aplicando para México y para Canadá, mientras que en Estados Unidos se aplicarían las disciplinas de la Organización Mundial del Comercio (OMC)”, dijo la SE en un informe publicado en la Gaceta del Senado.
“México debe estar preparado” ante la posible salida de Estados Unidos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), cuyas negociaciones arrancarán el próximo 16 de agosto en Washington, destacó.
Por ello, continuó la SE, “a la par de la modernización” del TLCAN se debe también actualizar el convenio comercial con la Unión Europea, consolidar la Alianza del Pacífico, profundizar y ampliar los acuerdos de cooperación económica y mejorar la integración con Asia-Pacífico a través del Tratado de Asociación Transpacífico (TPP) con los once países todavía participantes.
Este documento, presentado a la Cámara alta, también da las líneas de negociación y prioridades de México en el tratado.
Entre estas, destaca que la nación latinoamericana no aceptará la “reimposición de aranceles, cuotas u otros mecanismos que restrinjan las exportaciones mexicanas a Estados Unidos”.
Así, México renegociará para incorporar nuevas disciplinas, acordes al siglo XXI y que no estaban presentes durante la negociación del TLCAN original, que entró en vigor en 1994.
Por último, el documento aclara que las negociaciones serán siempre a tres bandas: EE.UU, Canadá y México.
De no entrar en la negociación, la SE reconoce riesgos; incremento de los aranceles, reducción de las inversiones e impacto de las perspectivas económicas del país.
Entre las prioridades del Gobierno mexicano para modernizar el acuerdo comercial se encuentra el de fortalecer la competitividad de América del Norte, manteniendo “acceso preferencial” para los bienes y servicios mexicanos en los otros países del TLCAN o promover las buenas prácticas.
Además, insiste en promover la certidumbre del comercio y las inversiones en América del Norte.
“En ello, juegan un rol crucial los mecanismos de solución de controversias que, a lo largo de más de dos décadas, han probado su efectividad”, señaló.
A diferencia de Estados Unidos, México no había adelantado sus prioridades ni líneas de negociación hasta la presentación de este documento oficial ante el Senado.
El secretario mexicano de Economía, Ildefonso Guajardo, anunció esta semana que para el proceso de modernización en puerta TLCAN fueron nombrados Kenneth Smith Ramos como jefe negociador técnico y Salvador Behar Lavalle como jefe negociador adjunto.
México, Estados Unidos y Canadá, socios del TLCAN desde 1994, celebrarán del 16 al 20 de agosto próximo en Washington la primera ronda de negociaciones para renovar el acuerdo.
En 2016, las importaciones estadounidenses desde México totalizaron 179.583 millones de dólares, mientras que las exportaciones fueron de 302.655 millones de dólares.
De esta manera, el comercio bilateral cerró en 482.238 millones de dólares, de acuerdo con datos aportados por la Secretaría de Economía.