Niegan libertad condicional a antiguo mafioso
Creen que no está listo para volver a vivir en sociedad
Por tercera vez, el gobernador Jerry Brown le negó la libertad condicional a René Enríquez, antiguo miembro de la Mafia Mexicana.
En los últimos años, Enríquez ha repudiado los crímenes que cometió y se ha aliado a organismos policiales, cooperando con investigadores, así como participando en videos de capacitación y dando discursos en conferencias.
El gobernador, informó Los Angeles Times, encomió a Enríquez por sus esfuerzos, pero, no obstante, decidió que no es apto para ser puesto en libertad.
Actualmente, Enríquez, de 55 años, está cumpliendo una condena de cadena perpetua en la Prisión Estatal de Ironwood, ubicada a 62 millas al este de Palm Springs, por dos asesinatos. En 1989, Enríquez ordenó la muerte de una traficante de drogas porque creía que le estaba robando. También inyectó a otro miembro de la mafia con heroína, antes de dispararle cinco veces en la cabeza.
Su historial delictivo también incluye ataques a otros reclusos, incluyendo agresión sexual contra un compañero, así como la venta de drogas y 23 cargos de robo.
Los comisionados estatales han recomendado la libertad condicional de Enríquez en tres ocasiones, y tres veces Brown se la ha negado.
El año pasado, Enriquez comenzó a hablar públicamente del abuso físico y sexual que sufrió a manos de miembros de su familia. En sus pláticas, él vincula las acciones que tomó dentro de la mafia al trauma de su infancia en la ciudad de Cerritos.
Brown reconoció el trauma de Enríquez, pero dijo que eso no explica su búsqueda de violencia y su ascenso dentro de la organización criminal.
El gobernador también citó a un psicólogo que concluyó que las nuevas acusaciones de abuso sexual generan dudas sobre la credibilidad de Enríquez e indican un riesgo moderado de futura violencia.