Asesinan a un primo de Enrique Peña Nieto en México
La violencia en el estado de México alcanza a un primo del Presidente: muere durante asalto en Atlacomulco
CIUDAD DE MÉXOCO – Un primo del Presidente Enrique Peña Nieto fue asesinado el pasado sábado al interior de un bar en el municipio de Atlacomulco, Estado de México, confirmó este día la Fiscalía mexiquense.
Se trata de César Maximino Montiel Peña, de 61 años de edad, quien, de acuerdo con los primeros reportes, habría protagonizado una riña con un sujeto – que hasta el momento no ha sido identificado – en un bar conocido como “Mi Despecho”, ubicado cerca de la Terminal de Autobuses de Atlacomulco.
Montiel Peña salió del lugar alrededor de las 3:00 de la madrugada y minutos después fue localizado sin vida sobre la calle Francisco Zarco en la colonia 2 de Abril, junto a un vehículo Ford Fiesta color rojo. De acuerdo con los peritos, el cuerpo presentaba varios impactos de bala.
En un asiento del vehículo fue hallada un arma de fuego calibre 22. Además, en el lugar se localizaron tres casquillos percutidos de una pistola 45.
La víctima fue identificada por su hija luego que la familia fue alertada por las autoridades.
Aunque al inicio se manejó con hermetismo, la Fiscalía General del Estado de México (FGEM) confirmó hoy que abrió una carpeta de investigación por el homicidio del primero del titular del Ejecutivo federal.
La base de la investigación, indica la FGEM, son testimonios que refieren que dos sujetos intentaban despojar a Montiel Peña de su vehículo, pero él se resistió, por lo que fue atacado a tiros.
Violencia en Edomex
Atlacomulco es la tierra del Presidente Peña Nieto, quien gobernó el Estado de México (2005-2011), donde la violencia ha alcanzado niveles históricos.
El año que recién terminó, 2017, fue el más violento en una década, de acuerdo con datos difundidos por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Justamente el Estado de México, la entidad gobernada por el priista Alfredo del Mazo, aparece en los tres primeros lugares de los tres principales indicadores de la violencia. Fue el primero en extorsión, con mil 54 carpetas abiertas; además aparece en el tercer lugar en secuestro, y el segundo en homicidios.
En secuestro, el primer lugar pertenece a Tamaulipas, gobernada por el panista Francisco Cabeza de Vaca, y el segundo es de Veracruz, también en manos de un panista, Miguel Ángel Yunes Linares.
La mayor cifra de homicidios por entidad en México pertenece a Guanajuato, con 4 mil 39; la entidad es gobernada por el panista Miguel Márquez Márquez. El segundo lugar es del Estado de México y el tercero, de Guerrero, en manos del priista Héctor Astudillo Flores.
Pocas soluciones
Pero enero de 2018 resultó igual o peor que todo 2017. La crisis de homicidios en el país dejó centenas de muertos en el primer mes del 2018. Las matanzas, feminicidios, enfrentamientos, hallazgos de fosas clandestinas brotaron por prácticamente todo el país.
Los especialistas consideran que este año podría ser peor que 2017 –que dejó cifras históricas– pues, encima de la ya grave problemática, las autoridades federales y locales volcarán su atención en el proceso electoral más que en la situación de inseguridad que vive el país.
“Uno oye que la campaña del candidato oficial [José Antonio Meade Kuribreña] va en declive. Y por el contrario parece que siguen creciendo más los otros dos candidatos. Y eso crea un panorama en el que me da la impresión en que el tema principal para este Gobierno federal es cómo modificar esto que es desfavorable. Yo sí creo que mucha de la violencia que hay ahora es producto de una gran desatención”, dijo recientemete a SinEmbargo Tomás Guevara Martínez, profesor de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS).
El pasado 10 de enero, el titular de la Secretaría de Gobernación (Segob) fue relevado, encargado de la seguridad interior. Miguel Ángel Osorio Chong, quien aspira a un lugar en el Senado de la República, fue sustituido por Alfonso Navarrete Prida, quien llegó a sustituir a varios de los colaboradores del político hidalguense.
El relevo se dio a poco menos de un año de que acabe el sexenio de Enrique Peña Nieto, quien mantuvo a Osorio Chong al frente de la Segob, pese a los resultados que dejó en violencia: 25 mil 339 carpetas abiertas por homicidio doloso, cifra no vista en las últimas dos décadas.
Édgar Cortez Morales, investigador del Instituto Mexicano de Derechos Humanos y Democracia AC (IMDHD), no ve que vaya a modificarse la estrategia frente a la violencia.
“En realidad no creo que hayan muchos cambios, acciones aparatosas [en el proceso electoral], que pueden dar la imagen de que están haciendo mucho más, creo que el tema es dar apariencia de efectividad. Pero sin que eso signifique una renovación o cambio de estrategia. Muchas de las acciones son reactivas, de corto plazo, y sin una perspectiva con proceso de suma de muchas acciones”, dijo Cortez Morales.