Las encuestas hablan: el pueblo estadounidense está con los dreamers, no con Trump
Los sondeos son consistentes: el apoyo para la legalización de los dreamers es sólido y la postura demócrata es la más popular, pero Trump y los republicanos siguen presionando por la solución más relevante para su base más extrema.
Cada nueva encuesta revela con más claridad que el público estadounidense está más cerca de los demócratas -y de los dreamers- que de Donald Trump y los republicanos, en su enfrentamiento alrededor de un plan migratorio y que, sobre todo, favorecen una legalización de los jóvenes inmigrantes y no están por construir el muro ni por llevar a cabo las deportaciones masiva que propone el plan “trumpiano”.
De hecho, las opiniones respecto a los inmigrantes han ido mejorando consistentemente en las encuestas de los últimos años y ningún sondeo reciente revela que la retórica de Trump haya tenido mella en la opinión nacional, aunque sí en grupos pequeños de la base republicana.
No obstante, eso no es suficiente para facilitar una solución. ¿Por qué?
Una de las cifras más reveladoras -aunque no la única- surgió esta semana en una encuesta de la Universidad Monmouth, una casa de estudios en Nueva Jersey que realiza constantes análisis de opinión pública sobre diversos temas de interés.
“La mayoría de los estadounidenses de todas las tendencias política están a favor de permitir la estadía en este país de los dreamers, jóvenes inmigrantes que vinieron de niños con sus padres al país y permanecieron ilegalmente”, reveló la citada encuesta, cuyos resultados son similares a numerosas otras como la de ABCNews, CNN, PEW y muchas otras. “La mayoría también creen que el estatus de los dreamers debe manejarse en forma separada de la seguridad fronteriza y también se oponen a construir el muro en la frontera”.
Una cifra resalta entre las demás: 82% de los estadounidenses dice el Dream Act debe aprobarse SEPARADAMENTE de un plan fronterizo o fondos para el muro.
En otras palabras: si a dreamers, no al muro y mantengan a los dreamers aparte del tema fronterizo. Es lo mismo que dicen los dreamers y los demócratas, por lo que políticamente hablando, este partido está justificado en mantenerse firmes en su postura actual y Trump y los republicanos están hablando, realmente, a un porcentaje pequeño, pero importante de su base.
“El pueblo está diciendo que respalda el Dream Act por sí mismo“, dijo Apolonio Morales, director político de CHIRLA. “Las cifras revelan que no hay razón para no llegar a un acuerdo que soluciones el futuro de los dreamers.
Una evaluación de las numerosas encuestas no partidistas de las últimas semanas lo explica claramente, pero la política en el Congreso está desconectada de lo que piensa la mayoría de los estadounidenses y tiene más que ver con la próxima elección de algunos congresistas y senadores que tienen miedo a perder su escaño. En resumen: toda política es local y no nacional, explicaron expertos y activistas.
La base anti inmigrante de Trump es la que tiene todo el debate estancado y la que Trump y los republicanos buscan satisfacer.
“Parte del problema es que hay apoyo para los dreamers, pero no hay el mismo nivel de apoyo popular para mantener el cierre de gobierno a cambio del Dream act y ese era el único tipo de palanca que tenían los demócratas para lograrlo”, dijo Sherry Bebitch Jeffe, analista política y profesora de la Universidad del Sur de California.
Entretanto, Trump sigue enfocado en azuzar a su base más radical, culpando a los demócratas de no negociar “una propuesta justa”, cuando su propuesta realmente es una solución extremista que apoya sólo una minoría de los estadounidenses.
El problema es que hay senadores y congresistas que temen las consecuencias de un voto contra Trump, explicó Cristina Jiménez, directora de United We Dream, en una reciente entrevista. “En el senado nos enfrentamos a la realidad de que había varios políticos demócratas con temor a perder sus escaños en las elecciones de este año”, dijo Jiménez.