L.A. pinta sus calles de blanco para combatir el calentamiento global
Las calles de L.A. clareadas con CoolSeal son de 10 a 15 grados más frías
Dentro de la lucha contra el cambio climático, la ciudad de Los Ángeles ha decidido cubrir sus calles con una capa de color blanco grisáceo conocida como CoolSeal, lo que supone temperaturas más bajas y, por tanto, menor aporta al calentamiento global. Esta capa blanqueadora se rocía en la carretera con camiones y luego se extiende por toda la superficie con raseros, aunque su impacto se extiende mucho más allá del borde del pavimento.
El asfalto oscuro absorbe entre el 80 y el 95 % de los rayos del sol, calentando no solo las calles sino todo el área circundante. Y L.A. está lleno de él, con lo que, cuando sus temperaturas superan los 100 grados Fahrenheit, las temperaturas de la superficie en sus carreteras de asfalto pueden subir a 150. Aumenta así un fenómeno conocido como el “efecto de isla de calor urbano”, que según la EPA puede agregar hasta 22 grados Fahrenheit a la temperatura promedio del aire en una ciudad, en comparación con el área circundante.
CoolSeal, fabricado por una compañía llamada GuardTop, ayuda a reflejar los rayos solares en el asfalto para que se absorba menos calor. De acuerdo con el Bureau of Street Services, las calles de L.A. que se han vuelto de color más claro con CoolSeal son de 10 a 15 grados más frías en promedio. Eso, a su vez, evita que el vecindario se caliente en exceso. Por consiguiente, los edificios no necesitan usar tanto aire acondicionado, lo que puede reducir los costos, beneficiando económicamente a los residentes y, en todos los sentidos, al medio ambiente.
Al enfriar el aire, el asfalto de color más claro también puede ayudar a prevenir enfermedades y muertes relacionadas con el calor. Su mayor reflectividad puede ahorrar la energía necesaria para iluminar calles y estacionamientos cuando el sol comienza a ponerse. De acuerdo con la EPA, la contaminación del aire, las emisiones de gases de efecto invernadero y el agotamiento de la calidad del agua impulsado por islas de calor también pueden mitigarse con pavimentos fríos.
Según los informes, L.A., paga $ 40,000 por cada milla que “pinta”. Se trata sin duda de un costo elevado, pero los defensores dicen que sus beneficios son invaluables.