Trump estaría preparando humillación final contra Sessions
Trump se plantea reemplazar al fiscal general con el propio jefe de personal de Sessions
Según informes del Washington Post el presidente Donald Trump habló con el jefe de personal de Jeff Sessions, Matthew Whitaker sobre remplazar al Fiscal General en su cargo.
Las fuentes cercanas a la conversación dijeron al Post que durante el encuentro no especificó si Whitaker relevaría a Sessions de forma temporal o permanente, ni que tan seria era la propuesta del presidente.
Como bien es conocido Trump lleva más de un año arremetiendo contra Session recordándole su frustración por su decisión de apartarse de todo lo relacionado con la investigación sobre la Trama Rusa debido a sus propios contactos con Moscú, una medida que reduce la influencia del secretario de Justicia sobre la pesquisa del fiscal especial Robert Mueller.
Aunque se ha rumoreado en varias ocasiones que Trump podría despedirle a él o a Rod Rosenstein, nunca ha llegado a hacerlo, y según fuentes de la Casa Blanca, el presidente no planea tomar ninguna medida al respecto al menos hasta después de las elecciones legislativas del próximo 6 de noviembre.
Sin embargo de remplazar a Sessions con su jefe de personal sería una humillación muy grande para el Fiscal General que ha sido un férreo aliado de Trump desde la campaña presidencial.
Si Trump sustituyera a Sessions con un nuevo fiscal general, este podría tomar las riendas de la investigación de Mueller y mermarla o incluso despedir al fiscal especial.
En septiembre de 2017, Whitaker escribió una columna de opinión para la cadena CNN en la que advirtió que el fiscal especial que investiga la trama rusa, Robert Mueller, estaba “peligrosamente cerca de cruzar” una “línea roja”, en referencia a su indagación sobre los posibles lazos financieros de Trump con Rusia.
Trump, el mes pasado, intensificó sus ataques contra Sessios en entrevista con The Hill diciendo : “No tengo un fiscal general”.
La especulación de que el presidente despediría a Sessions recuperó el impulso después de que el senador Lindsey Graham dijo que el fiscal general “muy probablemente” sería despedido después de las elecciones de noviembre.
“Creo que llegará un momento, más temprano que tarde, en el que será el momento de tener una nueva cara y una voz nueva en el Departamento de Justicia”, dijo Graham a Bloomberg News. “Claramente, el Fiscal General Sessions no tiene la confianza del presidente”.