CNN demanda a Casa Blanca para que devuelva pase de prensa a Jim Acosta
La Casa Blanca ha llamado "enemigos del pueblo" a periodistas que, a su juicio, hacen una cobertura negativa de la Administración
WASHINGTON—CNN entabló este martes una demanda contra la Casa Blanca para que devuelva el pase de prensa que le revocó el miércoles pasado a Jim Acosta, uno de sus corresponsales en la mansión presidencial, pero la Administración respondió con más recriminaciones contra la cadena por cable.
La portavoz de la Casa Blanca, Sarah H. Sanders, confirmó el miércoles pasado que las autoridades le revocaron la credencial de prensa a Acosta, en represalia por su presunta conducta agresiva durante una rueda de prensa con el presidente Donald Trump horas antes.
Acosta no recibió notificación previa sobre la suspensión de su pase –que adquirió por primera vez en 2013-, pero cuando regresó a la Casa Blanca para hacer un reportaje en vivo, un agente del Servicio Secreto, no identificado, le exigió que entregara el pase y le prohibió el paso.
Asociación de Corresponsales exige que la Casa Blanca devuelva credencial a Jim Acosta
CNN dijo en un comunicado que la revocación errónea de las credenciales, viola los derechos constitucionales tanto de la cadena televisiva como de Acosta.
“Hemos pedido a la corte una orden inmediata para que le devuelvan el pase a Jim, y solicitaremos un alivio permanente como parte de este proceso”, explicó CNN, sobre la demanda entablada en un tribunal federal capitalino.
En particular, la acción de la Casa Blanca viola la Primera Enmienda, que consagra la libertad de prensa, y la Quinta Enmienda, que garantiza el derecho de toda persona al debido proceso en este país, explicó un abogado de CNN.
This morning, CNN filed a lawsuit against @realDonaldTrump and top aides. The White House has violated CNN and @Acosta's First Amendment rights of freedom of the press and Fifth Amendment rights to due process. Complaint: https://t.co/43oX6L8xA7 pic.twitter.com/RvJ0Cgh6oi
— CNN Communications (@CNNPR) November 13, 2018
Statement from @BoutrousTed, attorney for CNN & @Acosta: pic.twitter.com/tFMgM1AIEZ
— CNN Communications (@CNNPR) November 13, 2018
La demanda cita a Trump; a su jefe de Gabinete, John Kelly, y el asesor de éste, Bill Shine; a Sanders, al director del Servicio Secreto, Randolph Alles, y a un agente del Servicio Secreto, no identificado.
El documento cita antecedentes para este tipo de demandas en los tribunales, incluyendo el caso “Sherrill v. Knight” en 1977, durante la presidencia de Lyndon Johnson.
En esa ocasión, el Servicio negó el pase de prensa a Robert Sherrill, periodista de la revista “Nation”, por considerarlo una “amenaza” contra el presidente, pero Sherrill ganó la demanda.
La mayoría de expertos legales predice que CNN tiene altas probabilidades de ganar el caso porque la Primera Enmienda protege a los periodistas de decisiones arbitrarias de funcionarios elegidos.
La Casa Blanca, que desde el año pasado ha acusado a CNN y a otros medios de ser “medios falsos”, dijo que Acosta puso las manos sobre la becaria que intentaba quitarle el micrófono, pero Sanders de inmediato fue objeto de críticas por divulgar en Twitter un video aparentemente manipulado por un grupo de ultraderecha para justificar la suspensión del periodista.
La cadena advirtió de que, aunque esta vez el inédito incidente afectó a Acosta, mañana podría ocurrirle a cualquier otro periodista.
De hecho, el viernes pasado, Trump sugirió que podría haber “otros” periodistas afectados más adelante, y ese mismo día criticó las preguntas de tres periodistas afroamericanas, incluyendo a April Ryan, una veterana corresponsal de la Casa Blanca para “Urban Radio” y contribuidora de CNN.
“Si no se protestan las acciones de la Casa Blanca, éstas crearían un efecto disuasorio para cualquier periodista que cubra a funcionarios elegidos”, dijo CNN.
Oídos sordos
La Casa Blanca dejó en claro que hará caso omiso a la demanda.
Sanders dijo en una declaración escrita que la demanda de CNN no es más que otro ejemplo de “fanfarronería” de la empresa mediática, y prometió que la Administración se defenderá “vigorosamente”.
Según Sanders, CNN tiene casi 50 corresponsales adicionales con pases de prensa, y Acosta no es “ni más ni menos especial” que cualquier otro periodista respecto a la Primera Enmienda.
Sanders recordó que el miércoles pasado, Trump contestó a dos preguntas de Acosta, pero éste se negó a entregar el micrófono a la becaria para que otros pudiesen hacer preguntas.
“No es la primera vez que este reportero se ha negado inapropiadamente a ceder a otros reporteros. La Casa Blanca no puede realizar una rueda de prensa ordenada y justa cuando un reportero actúa de esta manera, que no es ni apropiada ni profesional”, insistió.
Sanders también acusó a Acosta de “monopolizar” las ruedas de prensa, a las que asisten más de 150 periodistas.
Más apoyo para Acosta
Varias organizaciones periodísticas, incluyendo la Asociación de Corresponsales de la Casa Blanca (WHCA), y la Asociación Nacional de Periodistas Hispanos (NAHJ), respaldaron a Acosta la semana pasada.
Olivier Knox, presidente de WHCA, dijo que la organización “apoya firmemente la meta de CNN de que su corresponsal recupere su credencial de seguridad del Servicio Secreto que la Casa Blanca no debió quitarle para comenzar”.
“El revocar el acceso al complejo de la Casa Blanca fue una reacción desproporcionada a los eventos del miércoles pasado. Seguimos urgiendo a la Administración a que revierta el rumbo y reincorpore plenamente al corresponsal de CNN”, enfatizó Knox.
“El presidente de EEUU no debería meterse a seleccionar arbitrariamente a los hombres y mujeres que lo cubren”, puntualizó.
Por su parte, Ben Wizner, director del proyecto sobre libertad de expresión de la Unión de Libertades Civiles de EEUU (ACLU), señaló que la expulsión de Acosta, por órdenes de Trump, sólo por cumplir con su trabajo, es tanto “ilegal” como “anti-estadounidense”.
“No debería ser necesaria una demanda de CNN para recordarle al presidente de la Primera Enmienda. La Casa Blanca debe revertir su decisión de inmediato”, puntualizó Wizner.