Los peligros de los centros comerciales para los niños, alerta a los padres
Los centros comerciales se llenan de luces y decoraciones navideñas que atraen la atención de los niños, por lo que aumentan los peligros
Los centros comerciales están llenos de peligros para los más pequeños, peligros que se nos escapan y con los que hay que estar más alerta ahora que llega la época de más compras por la Navidad.
Nunca pensarías en dejar que tu hijo viaje en el auto sin el cinturón de seguridad abrochado, pero ¿qué tal cuando está en un carrito de compras? Siempre tomas su mano cuando cruza la calle, pero ¿con qué frecuencia lo haces cerca de una escalera mecánica en el centro comercial?
En el centro comercial bajan las alertas, nos relajamos. Es normal que los padres se distraigan y los niños se sientan intrigados por los ascensores, las escaleras mecánicas y los elaborados escaparates de las tiendas. Todo ello plantea una cantidad sorprendente de peligros que pueden causar lesiones graves.
Pero según aconsejan desde tiendas como Crate & Barrel, hay tips para evitar daños mayores. Todo se resume en: vigile a sus hijos y no los deje solos en ningún momento.
Los niños pequeños a menudo se asustan con las escaleras mecánicas y tienen razones para estarlo: alrededor de 2,000 niños, la mayoría menores de 5 años, se lesionan en las escaleras mecánicas cada año. La mayoría de esas lesiones se deben a caídas; el resto ocurre cuando las manos, los pies o la ropa de un niño quedan atrapados en las partes móviles de la escalera mecánica. Si bien algunas heridas son bastante leves (como cortes y contusiones por caídas), las lesiones por atrapamiento pueden aplastar las extremidades de un niño, incluso requerir su amputación.
Con los carritos de la compra también hay que tener cuidado.
Dejar que tu hijo viaje en un carrito de compras parece una conveniencia, no un peligro. Sin embargo, los accidentes relacionados con el carrito de compras envían a casi 21,000 niños menores de 5 años a la sala de emergencias cada año, principalmente por lesiones en la cabeza y el cuello, según la Academia Americana de Pediatría. Parte del problema radica en el diseño desequilibrado del carro.
Mantenga a su hijo fuera de la canasta. Asegúrelo en el asiento plegable del carro (asegúrese de que el cinturón de seguridad funcione). Mejor aún, elija un carrito que acomode a los niños en la parte delantera y baja, cerca del suelo, si hay uno disponible. Algunos están diseñados como automóviles y camiones, de modo que los pequeños compradores quedarán encantados. Y si su hijo se cae de uno de estos, es menos probable que sufra lesiones graves.
Nunca permita que su hijo viaje en el costado o detrás del carro. Dejarle empujar el carrito también puede provocar accidentes.
No coloque el portabebés encima del carrito. El peso del transportador puede hacer que se vuelque.
Manténgase siempre al alcance de su hijo cuando vaya de compras: solo se demora un segundo en caer o un carrito en volcar mientras está de espaldas.