Celebran el mes del corazón con los más pequeñitos de los hospitales
Lorena Maravilla tenía 29 semanas de gestación cuando por problemas de salud tuvo que dar a luz.
“Una semana antes de que la tuve tenía la presión muy alta y querían que me quedara aquí para que subiera mi estómago más tiempo, pero no pude y ya la tuve a los 7 meses y medio”, contó la madre de 29 años.
Ella y su esposo, Raúl García, esperaron pacientemente para que su bebé Kamila se mantuviera sana y mejorando en el hospital Adventist Health White Memorial en Boyle Heights.
Sus plegarias han funcionado. Kamila ya tiene 10 semanas de nacida y su recuperación es muy positiva, aseguraron los padres.
“Ya esta mejorcita, ojalá y pronto la podamos llevar a la casa”, dijo la mamá.
“Quiero tener a mi niña en la casa saludable y que esté con nosotros y la familia”, añadió García, de 28 años.
Para celebrar la salud y vida de Kamila y otros bebés que nacieron prematuros o con problemas de salud, los voluntarios de la Asociación Americana del Corazón (AHA) les regalaron gorritos rojos tejidos como parte del programa “Little Hats Big Hearts” (Pequeños gorritos grandes corazones) en celebración del Mes del Corazón que comenzó el viernes.
El programa “Little Hats Big Hearts” esta dedicado a crear conciencia sobre las enfermedades cardíacas, la principal causa de muerte entre los estadounidenses, y los defectos congénitos del corazón, el tipo más común de defectos de nacimiento en el país.
En el hospital White Memorial nacen alrededor de 3,000 niños cada año, 20% de los cuales tienen alguna condición que los lleva a cuidados intensivos neonatales, explicó Cesar Armendáriz, administrador del hospital.
“Entonces es una bendición para las familias poderles dar un poco mas de atención, un poco mas de amor”, dijo Armendáriz. “Y en colaboración con la Asociación del Corazón nuestros miembros de la tercera edad, del grupo ‘Vive Bien’ hay un programa donde ellos tejen gorritos y están participando y regalando los gorritos a las familias”.
Una de las voluntarias es Gloria Leal, de 74 años. Ella dijo que desde el año pasado ha sido voluntaria y le da mucha emoción hacer estas pequeñas prendas para los bebés.
“Yo aprendí a tejer a los 9 años y hace poco un hermano mío que estaba inscrito en el programa me dijo que viniera”, dijo la residente del Este de Los Ángeles. “Estoy muy feliz de poder cooperar con ellos [los bebés] y también me da gusto que voy a poder conocerlos”, recalcó mientras esperaba con un grupo de voluntarios afuera de la unidad de cuidados intensivos neonatales.
El hospital White Memorial es uno de los 30 hospitales que participan en el programa “Little Hats Big Hearts” que regala gorritos rojos a cientos de miles de bebés recién nacidos en 40 estados del país.
Armendáriz dijo estar agradecido con la AHA porque el White Memorial fue el hospital que dio inicio a la celebración de este año el primero de febrero.
“Febrero es el mes del amor pero también en cuestión de salud hay que cuidar el corazón”, dijo Armendáriz.
“Nuestro objetivo con Little Hats, Big Hearts no es solo crear conciencia, sino también alentar a las mamás a vivir con un corazón sano y ayudar a que sus hijos crezcan sanos y fuertes”, dijo Shawn Casey, Oficial Afiliada de Desarrollo de la AHA en un comunicado. “Enviamos nuestro mensaje de agradecimiento a los voluntarios que hicieron a mano cada gorrito con amor, así como a los hospitales participantes”.
Por su parte Maravilla dijo que con esta información ella ha aprendido que es importante visitar el doctor y que las madres deben cuidarse a ellas mismas primero para que sus bebés también estén sanos.
Para obtener más información sobre el programa y los hospitales participantes visite www.heart.org/LittleHatsBigHearts.