Cierran cuatro albergues para jóvenes inmigrantes en Illinois, tras acusaciones de maltrato
El personal de la empresa Heartland fue señalado, entre otras cosas, de sedar a un niño "indisciplinado"
Ocho meses después de que sus albergues para niños inmigrantes fueran sometidos a escrutinio público debido a acusaciones por abuso y supervisión inadecuada, Heartland Human Care Services dice que va a cerrar cuatro albergues en un suburbio de Chicago y aumentar personal, entrenamiento y otros recursos en las cinco instalaciones que le quedan.
La decisión, anunciada a los empleados en un memorándum el viernes, llega mientras otra agencia, Maryville Academy, proyecta abrir dos centros de acogida adicionales, incluyendo uno tan pronto como el próximo mes.
Oficiales de Heartland dijeron a ProPublica Illinois que su plan es trasladar a los menores de sus cuatro albergues en Des Plaines antes del fin de mayo. En total, las casas de acogida de Des Plaines tienen capacidad para hasta 116 menores; el cambio recortará la capacidad total de Heartland bajo regulación estatal algo más de un 20 por ciento, de 512 a 396.
Según el memorándum, obtenido por ProPublica Illinois, oficiales de Heartland decidieron cerrar sus instalaciones en Des Plaines después de una revisión interna y sesiones de consulta con el personal tras el caos que siguió a la campaña de mano dura “tolerancia cero” contra la inmigración del gobierno de Trump. La práctica separó a más de 2,700 menores de sus padres y los mandó a albergues a lo largo de los Estados Unidos, incluyendo 99 menores que fueron enviados a centros de Heartland en Illinois.
“Comenzamos este proceso el verano pasado después de los desafíos que experimentamos todos mientras nos ocupábamos de la llegada de niños que habían sido severamente traumatizados por la práctica del gobierno federal de separarles por la fuerza de sus padres en la frontera,” escribió el director ejecutivo, David Sinski, en la circular.
Algunos de los menores enviados a los albergues de Des Plaines dijeron que el personal les había maltratado y que habían visto a una persona que trabajaba allí sedar a un niño indisciplinado, acusaciones que fueron reportadas por el Washington Post el verano pasado. Las acusaciones, que han sido negadas por Heartland, causaron una investigación federal que sigue en curso, denuncias de representantes electos y protestas en los albergues y frente a eventos de Heartland para recabar fondos.
En una declaración escrita, funcionarios de Heartland dijeron que la decisión de cerrar los espacios en Des Plaines y trasladar a los menores a los albergues de Chicago fue motivada por el vencimiento del contrato de la organización en Des Plaines y por un esfuerzo de “alinear capacidad” con el número promedio de menores a quien ha dado cobijo en años recientes.
Aunque la campaña de tolerancia cero trajo nueva atención hacia el programa de centros de acogida de Heartland, los problemas que la organización está intentando corregir ahora datan de antes de esta política.
ProPublica Illinois reportó ampliamente sobre las condiciones en los albergues de Heartland el año pasado y encontró problemas repetidos relacionados a la supervisión inadecuada que han existido por años. El Departamento de Servicios Para Niños y Familias de Illinois (DCFS por sus siglas en inglés) ha determinado que Heartland no fue capaz de suministrar supervisión apropiada en casos como el de una empleada que tuvo una presunta relación sexual con un adolescente detenido, o el de menores realizando actividades sexuales en una sala común o el de niños huyendo durante una excursión.
Más de una docena de menores se han escapado de instalaciones de Heartland en años recientes, incluidos tres jóvenes que huyeron juntos de un albergue en un barrio en el norte de Chicago en agosto pasado.
Un portavoz del DCFS dijo que la agencia tiene dos investigaciones en curso a Heartland, las dos enfocadas en albergues de Chicago. ProPublica Illinois también ha hablado con varios menores que estuvieron detenidos, además de antiguos empleados de los centros, que dijeron que algunos empleados de las instalaciones frecuentemente amenazaban a los niños que se negaban a participar en actividades diarias con demorar la reunificación con sus familias.
Funcionarios de Heartland han dicho que tales amenazas no son parte de su reglamento.
Heartland Human Care Services, que pertenece a una organización sin ánimo de lucro más grande que se llama Heartland Alliance, ha suministrado servicios de albergue para menores inmigrantes durante más de dos décadas. Pero se expandió rápidamente en años recientes, y abrió las instalaciones de Des Plaines hace aproximadamente cinco años. Los cinco albergues de Chicago están en los barrios de Bronzeville, Rogers Park, Englewood y Beverly.
En toda la nación, unos 100 albergues hospedan a miles de niños y jóvenes inmigrantes cada año.
Heartland ha luchado durante mucho tiempo con el problema de pérdida de empleados en sus albergues, y ha tenido en particular dificultades encontrando gente para trabajar durante los fines de semana y los turnos de noche. La organización ocasionalmente solicita personal de agencias de empleo temporal para trabajar en sus centros de acogida. Más de una docena de empleados actuales y antiguos han dicho a ProPublica Illinois que se sentían sobrecargados en empleos que les abrumaban emocionalmente, mientras lidiaban con menores que frecuentemente habían sufrido violencia u otros traumas en sus países de origen o durante sus duras travesías a Estados Unidos.
En el memorándum al personal, Sinski dijo que cerrar las instalaciones en Des Plaines ayudaría a “afinar nuestros esfuerzos y maximizar nuestra eficiencia suministrando ayuda.” La organización planea trasladar a todos sus empleados de Des Plaines a puestos paralelos en los albergues de Chicago “así que deberíamos tener suficiente personal para el trabajo que hacemos en Chicago”
Según la circular, el personal de los albergues dijo a los funcionarios de Heartland que “nuestros equipos en la primera línea” se beneficiarían de un aumento de personal. Como respuesta, Sinski dijo que la organización iba a añadir 11 puestos nuevos y ofrecer entrenamiento a los trabajadores para manejar mejor situaciones traumáticas.
Jesse Bless, un abogado basado en Boston que ha representado a más de media docena de menores bajo el cuidado de Heartland en sus casos de inmigración, dijo que se alegraba de que Heartland estuviera trabajando para mejorar sus programas. Dijo que la reorganización corrobora “los terribles eventos del verano pasado.”
“Es una admisión implícita de que se cometieron errores y que el cuidado de los niños no fue adecuado,” dijo. “Revisaron sus procedimientos y están diciendo ‘Necesitamos hacerlo mejor.’”
Mientras Heartland traza el plan para cerrar algunos de sus albergues, Maryville Academy, una agencia católica de bienestar infantil que opera dos centros de acogida para menores inmigrantes en Illinois, planea expandirse.
Maryville está trabajando para abrir un albergue solo para varones en su campus de Des Plaines—en el mismo lugar donde Heartland está cerrando sus instalaciones—y espera poder abrir un albergue exclusivamente para niñas en la iglesia St. Alphonsus en el barrio de Lakeview de Chicago este año.
El gobierno federal propuso a la agencia aumentar su capacidad y ya ha aprobado la apertura del albergue de niños, dijo la Hermana Catherine Ryan, directora ejecutiva de Maryville.
“Lo que escuchamos de la gente de [La Oficina federal de Reasentamiento de Refugiados], lo que escuchamos de otras agencias, es que la necesidad de estos queridos niños es tan grande,” dijo. “No podemos atender a grandes números de ellos, pero queremos servir a los que podamos.”