Decenas se manifiestan en contra de que California sea un estado santuario
La "Marcha para Terminar el Estado Santuario" atrajo sobre todo a seguidores del presidente Donald Trump
La ciudad de Huntington Beach fue este sábado escenario de una marcha en contra de la ley que declara a California un “estado santuario” y que impide la colaboración entre las agencias federales de inmigración y las fuerzas locales.
La denominada “Marcha para Terminar el Estado Santuario”, que atrajo sobre todo seguidores del presidente Donald Trump, se celebró sin incidentes, a pesar de la “contramarcha” a favor de los inmigrantes que se desarrolló cerca.
“Inmigrantes ilegales vienen aquí a manejar embriagados y a cometer crímenes que están afectando a nuestra sociedad”, declaró a Efe Bassad Pechi, quien agregó que se sumó a la manifestación contra la ley “santuario” en nombre de las víctimas estadounidenses que han muerto a manos de indocumentados.
“California debe de dejar de proteger a los indocumentados y apoyar el muro”, fueron algunas de las consignas que gritaron los manifestantes, quienes criticaron que a causa de la norma los cuerpos de seguridad locales no puedan colaborar con el Servicio de inmigración y Control de Aduanas (ICE).
Por su parte, un grupo de defensores de los inmigrantes declararon que “los inmigrantes son bienvenidos a California“.
Entre ellos figuró Felicia Aguilar, una estudiante de la Universidad de California Los Angeles (UCLA) y quien aseguró que la medida ha ayudado a mantener a los agentes de ICE fuera de los campus universitarios.
“Muchos de mis compañeros se sienten un poco más seguros, y necesitamos unirnos y defenderlos de estos ataques motivados por el odio y el racismo“, subrayó.
La convocatoria se dio cuando se espera un fallo de una corte de apelaciones, con sede en San Francisco, en torno a una demanda del Gobierno para derogar las leyes santuario.
El panel de tres jueces ya ha dicho que California tiene la autoridad para promulgar esta ley en vigor desde el año pasado, pero Pechi argumenta que la última palabra la tendrá el Tribunal Supremo, de mayoría conservadora.
Los opositores a las leyes santuario también esperan que la querella legal que entabló Huntington Beach prospere y la ciudad pueda dejar de aplicar la ley estatal.
La policía de Huntington Beach, ciudad al sur de Los Ángeles, informó que arrestó al menos a dos jóvenes que participaron en la marcha a favor de los inmigrantes.
Dos decenas de veedores legales se hicieron presentes para vigilar la actuación de las autoridades locales.