Qué es el Feng Shui: la filosofia oriental para armonizar el hogar
Haz que fluya la energía en tu hogar para el beneficio de tu familia.
El hogar debe ser un santuario, un lugar de reposo y de revitalización energética. El Feng Shui (viento y agua, en su traducción literal) es un antiguo sistema filosófico chino de origen taoísta basado en la ocupación consciente y armónica del espacio, con el fin de lograr de este una influencia positiva sobre las personas que lo habitan.
En tiempos antiguos, el Feng Shui era una forma de conocimiento que estudiaba los cambios que ocurren en la naturaleza, el clima y los astros, y aunque sus orígenes varían según las fuentes, existiendo diversas escuelas al respecto, su base sobre el flujo de energía toma la simbología del I ching o libro de los cambios.
Debido a su complejidad y sus diferentes vertientes, es difícil generalizar esta disciplina, sin embargo, para integrar esta filosofía a tu hogar, hay tres aspectos fundamentales sobre los que se basa esta filosofía, según Bioguía.
Para la cultura china, todo lo que forma parte del mundo físico está dotado de una energía vital llamada Chi, o también denominada como Ki, Qi, Prana o Fuerza de la Vida. Su objetivo principal es generar energía positiva a nuestra vida y su flujo se modifica según la disposición del espacio y la orientación de los objetos.
El chi se manifiesta a través de la segunda característica principal del Feng Shui: el Ying y el Yang. Es posible que te sea familiar, siendo un término muy popular en la actualidad como la base de la oposición y el complemento. En el caso del chi, el ying y el yang tiene dos caras: una positiva y una negativa; por lo que la idea del Feng Shui es resaltar el “chi bueno”, por encima del malo, aunque debes estar consciente de que esa energía no se elimina, sino que complementa y equilibra a la buena, de acuerdo a la distribución, color y forma de los artículos del hogar.
De acuerdo con The Spruce, el chi puede fluir de manera adecuada para generar abundancia y demás virtudes a tu hogar por medio de los cinco elementos naturales: fuego, tierra, metal, agua y madera; su ubicación y características. Asimismo los colores y las formas de las cosas pueden expresar necesidades específicas dependiendo de su disposición.
El tercer elemento básico para entender la filosofía del Feng Shui, es el Mapa Bagua. En China, bagua significa “ocho trigramas” y cada uno de ellos corresponde a una serie de aspectos: la orientación con base en los puntos cardinales y los circuitos por los que se mueve la energía, parte de la naturaleza, parte de nuestro cuerpo, miembro de la familia.
Bioguía nos ayuda a entender este último concepto con base en una ejemplificación sobre lo que significa cada color y lado según el punto cardinal, para tomar en cuenta a la hora de crear el estilo de cada habitación.
En interiorismo, lo más importante es saber qué dirección de la casa o espacio se relaciona con qué tipo de energía, a saber:
- Norte: carrera, trabajo y vida. Agua que fluye. Riñón, huesos, vulva y oído.
- Noreste: autoconocimiento, intelecto, conexiones. Tierra, globo terráqueo. Estómago, pecho, manos.
- Este: antepasados, familia, salud. Maderas, plantas. Ligamentos, piernas, pies.
- Sureste: finanzas, fortuna, prosperidad. Madera y fuentes de agua. Huesos, cadera.
- Sur: prestigio, reputación, reconocimiento. Fuego. Corazón, arterias, ojos.
- Suroeste: relaciones, amor. Tierra. Pecho, estómago, órganos internos.
- Oeste: creatividad, hijos, dinero. Metal. Nariz, cabello, boca.
- Noroeste: viajes, amigos, benefactores. Metal. Pulmones, piel, cabeza.