Manejar ebrio, principal causa de arrestos de inmigrantes en L.A.
Es el delito más recurrente que aparece en sus antecedentes penales
El delito principal que lleva a que los inmigrantes mexicanos sean arrestados y entregados al Servicio de Migración y Aduanas (ICE) en el área de Los Ángeles tiene que ver con manejar bajo los efectos del alcohol y otras sustancias, lo que se conoce por sus siglas en inglés como DUI; y cerca de la mitad de ellos, un 45% son detenidos por las policías locales.
“Tristemente el DUI es el delito más recurrente en el que caen nuestros paisanos”, dijo el cónsul de protección del consulado de México en Los Ángeles, Felipe Carrera Aguayo.
La cónsul de México en Los Ángeles, Marcela Celorio anunció que están planeando una campaña para concientizar a la comunidad mexicana sobre el peligro de conducir ebrio, y sus implicaciones en el estatus migratorio.
“¿Cómo es posible que el DUI sea el mayor delito? Queremos hacer una campaña más agresiva con un actor o una figura reconocida entre los mexicanos sobre los riesgos a los que se enfrentan porque no solo es una multa sino que terminan con la separación de la familia”, afirmó la cónsul Celorio. Hizo ver que además el DUI lleva a la violencia doméstica.
Durante un encuentro con representantes de los medios de comunicación, los diplomáticos mexicanos dieron a conocer que desde que el presidente Donald Trump asumió la presidencia de los Estados Unidos hace tres años, han sido arrestados en el área de Los Ángeles, 7,170 inmigrantes.
“De ese número, el 72% reconoció tener antecedentes penales, el 70% antecedentes migratorios – deportaciones previas -, y 1% no tenían ningún tipo de antecedente”, dijo el cónsul Carrera Aguayo.
El 96% de los mexicanos arrestados fueron hombres con una edad promedio de 37 años, y 21 años viviendo en Estados Unidos.
“El 32% se dedicaba a la construcción, 7% a la agricultura, 7% a la cocina”, dijo.
También reveló que el 15% son de Michoacán, 12% de Jalisco, y 10% de Guerrero.
“El 34% están casados, 31% solteros y 21% vivían en unión libre”, expuso.
El cónsul Carrera dijo que en términos numéricos el número de arrestos de inmigrantes mexicanos no ha cambiado mucho entre la administración Obama y la de Trump.
“Ha sido un cambio más cualitativo que cuantitativo relacionado con el programa de prioridades. La administración de Obama se enfocaba en las personas de más reciente llegada; y la de Trump en quienes llevan más años”, dice.
Y observa que las detenciones masivas o indiscriminadas que un inicio se esperaban, no han ocurrido. “Pensamos que tiene que ver con que tienen la misma capacidad en personal y equipo que antes de Trump”, indica.
Tampoco tienen reportes de hijos que hayan pasado a ser custodia del estado a causa del arresto o deportación del padre o la madre. “Al ser detenidos por ICE y deportados, se quedan con alguno de los padres que permanece en el país”, afirma el cónsul Carrera Aguayo.
La cónsul Celorio recordó que mañana y tarde, de sábado a domingo, realizan visitas al Centro de Detención del ICE en Los Ángeles; y todos los días tienen abogados en las instalaciones del consulado para ofrecer consultas gratuitas a los mexicanos que necesiten asistencia legal migratoria.
“Se les escucha y se les da una opinión sobre su caso. No necesitan sacar cita para hablar con los abogados. Los horarios de atención son entre 9:30 a.m. y 1:00 p.m.”, aclara el cónsul Carrera Aguayo.
Reacciones
Francisco Moreno, vocero del Consejo de Federaciones Mexicanas (COFEM) dice que desafortunadamente las detenciones por manejar con alcohol o drogas (DUI) es uno de los principales problemas del mexicano inmigrante.
“Es una cuestión cultural y educación. No sabemos controlarnos cuando bebemos. A la gente se le hace fácil manejar tomado porque así lo hacen en México. Es difícil que se les quite esa mala costumbre, y no la dejan hasta que los detienen y arrestan. Lo malo es que muchos no aprenden a la primera, la policía los agarra dos o tres veces”, observa,
Enfatiza que esto es grave cuando el inmigrante es residente o indocumentado.
“Es cuestión de educarnos y sensibilizarnos para portarnos bien. Tal vez en las escuelas se deba educar a los hijos para que estos a sus vez le digan a sus padres que no deben manejar borrachos”, dice.
Manejar bajo la influencia de alcohol y drogas lleva al pago de fuertes multas, la suspensión de la licencia, cárcel, y puede llevar al arresto y deportación.
En base a su experiencia, en las cortes de migración, el abogado en migración Alex Gálvez dice que hay cinco pecados capitales que ponen a los inmigrantes en un riesgo grande de deportación.
“Estos son: Violencia doméstica, manejar bajo la influencia del alcohol, robos menores en tiendas departamentales, prostitución y drogas”.