Los azulgrana sufren cada partido: el Barcelona vino de atrás dos veces y resolvió en casa del Betis

Estuvo detrás en el marcador en dos ocasiones, pero logró llevarse os 3 puntos

Clément Lenglet celebra su gol que contribuyó al triunfo culé.

Clément Lenglet celebra su gol que contribuyó al triunfo culé. Crédito: EFE

El Barcelona derrotó 3-2 a domicilio al Real Betis gracias a la superioridad que demostró en el segundo tiempo ante un conjunto sevillano que se mostró frágil atrás y con muy poca llegada. Los azulgranas se aferran a la lucha por el título de Liga, se redimen de la eliminación copera y alejan a los béticos de Europa.

Sin embargo, nadie quita las sensaciones de que el Barça sufre demasiado y puede perder contra cualquier equipo.

Tras un primer periodo en el que el Betis no aprovechó haberse adelantado dos veces, por medio de Canales de penalti y de Fekir, al empatar primero el holandés Frenkie de Jong y justo antes del descanso Sergio Busquets, el Barcelona se impuso en la segunda mitad, creó muchas ocasiones y de nuevo capitalizó a balón parado, como en el 2-2, recogió su premio con un gol de cabeza de Lenglet a 18 del final.

Con las bajas de larga duración de los atacantes Dembelé y Luis Suárez, Quique Setién, recibido con indiferencia y en todo caso con división de opiniones en el regreso a la que fue su casa, introdujo cuatro cambios respecto a San Mamés: el lateral exbético Junior, el central francés Umtiti, el volante chileno Arturo Vidal y el punta galo Griezmann, en lugar de Jordi Alba, Piqué, Rakitic y Ansu Fati.

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