La Víbora: Sofía Castro: lo más falso y cursi de ‘Mira quién baila’
A nuestra serpiente no le convencen las muestras de cariño entre Angélica Rivera y su hija
Tengo dos días que no paro de llorar. Es que vi el video en el que la Gaviota sorprende a las Gaviotita en los ensayos de “Mira Quién Baila“.
Sí, la cara de queso, la pobrecita que estuvo –o está– viviendo en Los Angeles con la falsa ilusión de que algún día va a triunfar en Hollywood. ¿Cómo se llama, cómo se llama? Es que es tan insignificante que ni siquiera me acuerdo de su nombre… ¡Ah, sí!, Sofía Castro, la que venía con sus hermanas y con la Gaviota cada rato a Beverly Hills en el avión presidencial a gastarse en ropa carísima el dinero de los mexicanos, ¿se acuerdan?
Bien, pues ahora esta muchacha es una de las participantes del reality de Univision, que además de cursi es patético. Para que me entiendan, es una copia mal hecha de los programas de baile de las cadenas en inglés. Y claro, como ahora ni la Gaviota ni las hijas viven en Los Pinos, y como ya no tienen esa partida millonaria a la que tenían acceso cuando la Gaviota estaba casada con el babas de Enrique Peña Nieto, pues tienen que buscarse la vida, aunque eso signifique hacer el ridículo en shows que ya nadie ve ni le interesan.
Pero bueno, volviendo al tema de mi llanto, en el video que les cuento la Gaviota se deshace en halagos para la cara de queso; le dice que es una “niña” –aunque ya tiene 23 años– buena, que es una guerrera y otras tonterías. Y es que ustedes saben, soportar tanta infamia que vivió la familia Castro cuando despilfarraron durante seis años el dinero del pueblo mexicano no fue nada fácil. No cualquiera tolera que ventilen en los diarios que gastaste en una prenda $10 mil dólares, o que tu mamá le paga a un maquillista $3 mil dólares por sesión. Aguantar todo eso sí te hace una guerrera, definitivamente.
Luego viene la parte más interesante del video, cuando la cara de queso dice que se tiene que esforzar mucho que porque viene de una familia “talentosísima”. Aquí no me quedó claro a quién se refiere, ¿a la Gaviota, a las hermanas, al papá, que produce puros churros para Televisa? Es que ustedes saben, actuar en telenovelas, como las que hacía la Gaviota, es dificilísimo.
Esos papeles requieren de mucho cerebro, mucho talento, mucha escuela. Ni Hollywood le llega a los talones a esas producciones. Por eso estoy a punto de comenzar una campaña para exigir que la Gaviota regrese a la televisión, pero que le paguen bien, porque eso de verla haciendo fila con la pelusa en los aviones comerciales no me parece. Ojalá que me hagan caso.