¿Señal apocalíptica? Se desborda Mar de Galilea
La última vez que ocurrió este fenómeno fue hace 300 años
Desde hace unos días se han vuelto virales unos videos en donde se aprecia al famoso Mar de Galilea completamente desbordado, un fenómeno que no ocurría desde hace 300 años.
Los más fatalistas aseguran que esto es una “señal más de que el Apocalipsis se acerca”, aunado a la pandemia de coronavirus, la actividad registrada recientemente en el llamado Anillo de Fuego, entre otros eventos un tanto místicos y sobrenaturales.
El llamado Mar de Galilea en realidad es un cuerpo de agua dulce, es decir un lago, el cual se encuentra en Israel. Debido a que se encuentra a 209 metros debajo del nivel del mar es prácticamente imposible que registre algún tipo de oleaje.
El Mar de Galilea no presenta Oleaje. Es un "Lago" cuyas aguas provienen de fuentes subterráneas y de ramas del Río Jordán . pic.twitter.com/UXC61tupYW
— Legatus ن 🇻🇪🕯️ (@el_legionariodm) April 11, 2020
Sin embargo, en las imágenes que se hicieron virales se puede ver las aguas de este lago saltando abruptamente, como si se trataran de potentes olas. A pesar de la intensidad, este fenómeno no puso en riesgo a los habitantes de este lugar.
https://twitter.com/Enterate_SV/status/1249330441577996289?s=20
No es ninguna señal apocalíptica
Lo ocurrido en el Mar de Galilea tiene una explicación científica.
Desde el año pasado, el nivel del lago ha registrado un considerable incremento, lo cual explicaría prácticamente en su totalidad lo que se registró hace un par de días.
El Lago Tiberíades (Kineret en hebreo), más conocido como Mar de Galilea, donde Jesús caminó sobre sus aguas, multiplicó los panes y peces y fue donde se apareció a sus discípulos tras resucitar, después de 5 años de sequía y temiendo pq se secara, empieza a desbordarse. pic.twitter.com/83Z4tgnqkH
— Jorge P. ® (@jorge_palazon) April 12, 2020
Recordemos que en La Biblia, varios de los discípulos de Jesús justamente eran pescadores en el Mar de Galilea y además, fue en este sitio en donde Cristo se reencontró con ellos tras resucitar el domingo de Pascua.