Ni en momentos de emergencia, algunos latinos quieren ayudar a los trabajadores inmigrantes

Dos hispanos de filiación conservadora presentaron una demanda de emergencia contra el gobernador de California, Gavin Newsom, en un intento por bloquear las ayudas por 75 millones de dólares que el estado dará a indocumentados que no califican para seguro de desempleo, informó este jueves la organización Center for American Liberty.

En un comunicado, la organización explicó que la concejal de la ciudad de Whittier, Jessica Martínez, y el salvadoreño Ricardo Benítez, presentaron la demanda, argumentando que la ley de California y la ley federal prohíben la extensión de los beneficios de desempleo a los indocumentados.

“El Gobernador dejó en claro en sus comentarios que está dando 75 millones en lugar de beneficios de desempleo que las leyes estatales y federales prohíben a los extranjeros que trabajan aquí ilegalmente”, dijo en el comunicado el director ejecutivo del centro, Harmeet K. Dhillon.

Dhillon también criticó el plan de Newsom de utilizar a las organizaciones comunitarias para repartir los fondos de 500 a 1.000 dólares a las familias indocumentadas.

“Es preocupante que las organizaciones sin fines de lucro sin nombre, que no tienen que rendir cuentas al contribuyente, van a recibir y distribuir dólares de los contribuyentes”, subrayó Dhillon.

Los demandantes son candidatos republicanos para la Asamblea estatal.

Benitez, quién nació en El Salvador y emigró a Estados Unidos en 1975 siendo menor de edad, advierte en la demanda que a pesar de que fue un inmigrante indocumentado hasta 1986, cuando adquirió la ciudadanía, “nunca ha tomado un centavo del gobierno en forma de asistencia pública”

El inmigrante es actualmente un candidato para el Distrito 39 de la Asamblea de California, y en los últimos días supuestamente “muchos votantes se han acercado a él a expresarle su preocupación por estos fondos públicos distribuido a inmigrantes indocumentados”, alega la demanda.

Por su parte Martínez, quién se desempeña como miembro del Consejo de la Ciudad de Whittier, advierte en la querella que “tiene grandes preocupaciones sobre el gobernador gastando fondos de emergencia de COVID-19 para dar prestaciones de desempleo a quienes la ley dice que no tienen derecho a beneficios de desempleado”.

Dhillon y su organización habían demandado ya al gobernador Newsom la semana pasada en nombre de tres iglesias del sur de California, que pretendían celebrar sus servicios en persona a persa de la orden de permanecer en casa para enfrentar la pandemia de coronavirus.

En un fallo dado a conocer el miércoles, el juez de Los Ángeles Jesús Bernal desestimó la solicitud de las tres iglesias.