Conoce a los latinos que se oponen a ayuda financiera para indocumentados

Dos latinos republicanos de Los Ángeles, candidatos a un escaño en la Asamblea Estatal, demandaron al gobernador de California, Gavin Newsom para bloquear los 75 millones de dólares en ayuda financiera para los inmigrantes indocumentados impactados por la pandemia del coronavirus.

La demanda fue presentada por el grupo conservador Center for American Liberty, y el grupo legal Dhillon Law, pero los demandantes son la concejal de Whittier, Jessica Martínez quien también es candidata a la Asamblea por el distrito 57 del sur del Valle de San Gabriel; y Ricardo Benítez, candidato a asambleísta por el distrito 39 de Pacoima. 

El gobernador Newsom pretende dar 500 dólares por persona, a aproximadamente 150,000 trabajadores que debido a su estatus migratorio no fueron incluidos en el paquete de recuperación económica aprobado por el Congreso, que incluyó dar un cheque de 1,200 dólares por adulto.

La demanda establece que Newsom excedió su autoridad legal al apartar 75 millones de dólares de fondos estatales para dar a organizaciones no lucrativas del estado, las que a su vez, entregarán el dinero a los inmigrantes indocumentados que se quedaron sin empleo a causa de la contingencia sanitaria.

La Opinión buscó a Martínez y a Benítez, pero ninguno de ellos se hizo disponible para comentar sus razones para demandar al gobernador, e impedir que se dé apoyo a las familias indocumentadas.

¿Quién es Jessica”

La republicana Jessica Martínez, de raíces mexicanas, fue electa concejal de la ciudad de Whittier, el 1 de marzo por un periodo de cuatro años, y se convirtió en la primera latina en ser electa al Concejo.

Según la biografía publicada en la página oficial de la Ciudad de Whittier, tiene un doctorado por la Escuela de Leyes Trinity, y maestrías en Derechos Humanos Internacionales y Bioética.

Es maestra en el Distrito Escolar de la Ciudad de Whittier donde ha vivido por más de 20 años, esposa de un veterano, madre de cinco hijos adultos y miembro activo de la Iglesia Anglicana.

¿Quién es Ricardo?

Es un republicano quien vino al país como inmigrante de El Salvador en 1975. Ya convertido en ciudadano de los Estados Unidos, siempre ha competido para ser asambleísta por el distrito 39 de Pacoima en la Asamblea, pero nunca ha podido ganar una elección. 

En una entrevista con La Opinión en 2018, cuando hacía el tercer intento por llegar a la Asamblea, confesó que seguía buscando una curul porque siempre llegaba al final en las elecciones.

“Yo soy como un novio al que la novia no le hace caso; y que sigue insistiendo, hasta que le den una oportunidad”, dijo.

Y explicó además que se sentía motivado porque su distrito estaba lleno de basura y falta de atención.

Reveló que se afilió al Partido Republicano animado porque fue un republicano, el presidente Reagan quien dio la amnistía que permitió que muchos inmigrantes regularizaran su estatus migratorio en la década de los 80.

Sin embargo, dejó en claro que él no estaba a favor de las fronteras abiertas. 

“No se puede”, señaló. Y criticó al partido Demócrata porque – dijo – que lo único que le interesa es que el hispano siga pobre. “Te vamos ayudar a ser más pobre, es su lema. No podemos seguir así. No vemos ningún cambio con los demócratas”.

Benítez se gana la vida como contratista, y reside en Sun Valley, un barrio en el Valle de San Fernando del condado de Los Ángeles.

Inverosímil

El consultor demócrata Mario Beltrán dijo que resulta inverosímil que un personaje como Ricardo Benítez que fue indocumentado, se ponga en una posición de odio hacia sus propios orígenes.

“Tanto él como Jessica Martínez, están convencidos de que quienes no entraron al país de manera legal, no merecen esos incentivos. Su ideología es de extrema derecha y radical”.

Prueba de ello, citó, es que vemos a Jessica, publicar fotos en su página de campaña por la Asamblea, al lado del sheriff del condado de Maricopa en Arizona, Joe Arpaio; o del congresista antiinmigrante, Tim Donnelly.

“Se sienten muy orgullosos de su odio absoluto hacia los inmigrantes indocumentados. Mi critica más grande hacia concejales como Jessica, es que al negarse a que se apoye a quienes se han quedado sin empleo por el coronavirus, los obliga a salir enfermos a la calle a buscar cómo ganarse la vida, y exponen la salud de toda una comunidad”.

Un grupo de vecinos inició una recaudación de firmas en el sitio Change.org para pedir a Jessica Martínez que dé marcha atrás en lo que consideran un vergonzoso esfuerzo por usar como chivo expiatorio a los inmigrantes.

“Creemos que los inmigrantes pagan una justa proporción de impuestos y proveen funciones esenciales a través de su trabajo duro, especialmente durante esta pandemia”, indicaron los peticionarios.

Motor de la economía

Según el reporte del Centro de Estudios para la Integración de la Inmigración de la Universidad del Sur de California, hay aproximadamente 886,000 inmigrantes indocumentados en el condado de Los Ángeles. En tanto, 852,000 ciudadanos de EEUU viven con familiares indocumentados; y 273,000 residentes permanentes conviven bajo su mismo techo con algún familiar sin papeles.

De acuerdo a un reporte de 2014 de New American Economy, solo los inmigrantes hispanos aportan a la economía del condado, 95.3 billones de dólares.

Protestas

El fin de semana, un grupo de unos 15 activistas llevaron a cabo una protesta fuera de la casa de Jessica Martínez en Whittier, contra su decisión de apoyar la demanda.

“No nos vamos a quedar de brazos cruzados. Vamos a seguir luchando por los derechos de los indocumentados; y volveremos a protestar contra Martínez; e iremos al Valle de San Fernando a manifestarnos en contra de Benítez para que se desistan de demandar en contra de los apoyos para los inmigrantes”, dijo la activista de Whittier, Patty S. Chávez.

Y completó que por obtener dinero de los republicanos para sus campañas, Jessica y Ricardo son capaces de vender su alma al diablo. “Los están usando como pieza de ajedrez para golpear a su propia comunidad. Son unos traicioneros”.

Jesse Melgar, vocero de Newsom dijo que California está tomando acciones moralmente necesarias para asistir a todos los afectados por el COVID-19. 

“Estas acciones benefician a la salud pública y al bienestar económico de las familias y comunidades más golpeadas por la pandemia. Estamos deseando defender en la corte, lo que sabemos que es correcto”