Cuándo el vino te produce resaca… y cómo evitarla
Todos disfrutamos de una copa de vino, es el mejor acompañamiento de deliciosas comidas y sobremesas. Sin embargo ¿Te has preguntado por qué nos da resaca? Conoce lo que sucede cuando se nos pasan las copitas
El vino es una de las bebidas alcohólicas más populares y consumidas en todo el mundo, se trata de una bebida que se obtiene de la fermentación del mosto o jugo de las uvas; dicho proceso se produce por la acción metabólica de las levaduras, que también transforman a los azúcares de la fruta en etanol y gas en forma de dióxido de carbono. Desde épocas antiguas el onsumo de vino ha estado muy visto visto por la alta sociedad occidental, gracias a ello es una tendencia que esta en constante evolución y gracias a ello se han creado todo tipo de vinos, mezclas y variantes. También es una bebida que se ha vuelto el aliado perfecto de la buena gastronomía y claro de largas sobremesas.
Lo que sucede es que a muchas personas por más que les agrade beberlo les sienta un poco mal, es por ello que existen muchas preguntas en torno temas como: la intolerancia del vino, las resacas y los sulfitos; la noticia es que se trata de un tema sorprendentemente complejo del que vale la pena hablar.
¿Qué es una resaca?
Es importante empezar entendiendo qué sucede en el cuerpo cuando presentamos resaca, si investigas en línea un poco sobre el tema prácticamente todas las respuestas coinciden: Una resaca se refiere a una serie de síntomas desagradables y diversos cuadros de malestar que una persona presenta después de una excesiva ingesta de alcohol. Existen múltiples síntomas que por supuesto varían en intensidad y aparición según cada persona pero entre los más populares se encuentran: Fatiga y debilidad, sed, dolor de cabeza, dolor muscular, náuseas, vómitos, dolor de estómago, mal sueño, mayor sensibilidad a la luz y sonido, mareos, inestabilidad, disminución de la capacidad de concentración, trastornos del estado de ánimo: depresión, ansiedad e irritabilidad. Aunque claro esta que siempre puedes descubrir los síntomas en carne propia después de beber 2 botellas de un alcohol barato.
¿Cuánto alcohol en realidad puede procesar el cuerpo?
Una de las mejores maneras de evitar una resaca es simple y consiste en moderación, después de todo es importante saber que el alcohol excesivo siempre será una especie de veneno para el cuerpo. Una botella de vino contiene entre un 11 y 15% de alcohol por volumen y nuestro cuerpo puede procesar, en promedio, una unidad de alcohol (10 ml de alcohol puro o 100 ml a 10% de alcohol) por hora. Esto significa que procesamos una pequeña copa de vino (125 ml) en más de una hora y media.
Imagínate uno de esos días en los que tomas un poco más de una copa, pongamos como ejemplo que tomas media botella de vino (tres vasos pequeños de vino) ¿Cuánto tardará el hígado en procesarlas? Las matemáticas son crueles: entre cuatro y cinco horas.
La realidad ¿Qué es lo que causa la resaca?
Cuando se habla de una resaca de vino es muy sabido que la gente tiende a culpar a los famosos sulfitos, sin embargo es un mal concepto del que normalmente se habla sin saber mucho del tema. Resulta que los sulfitos tienen un papel importante que desempeñar en el proceso de vinificación, de hecho desde la Edad Media. Si puedes comer una taza de albaricoques secos sin resaca (tienen más sulfitos que una botella de vino) y tienes resaca por beber demasiada cerveza o licores entonces: los sulfitos no son la causa de la resaca.
Y aunque es poco específico y científico en cuestiones de terminología, es que el principal culpable de la resaca es el alcohol en sí; de hecho es simple demasiada bebida, es la receta completa de una buena resaca. De hecho todo el tiempo al digerir la comida producimos alcohol en el estómago, pero estamos hablando de cantidades diminutas que nuestro cuerpo puede procesar fácilmente. De manera natural el organismo esta equipado para procesar el alcohol hasta cierto punto, lo que sucede es que cuando lo consumimos de más de vuelve tóxico y por supuesto que tenemos una capacidad limitada para procesarlo rápidamente. Estas son grandes explicaciones para entender las razones por las cuales el alcohol puede llegar a ser tan peligroso e inclusive causar la muerte, esto se da mediante una intoxicación de alcohol. En su mayoría los síntomas más comunes esconden un proceso interesante:
Dolores de cabeza relacionados con la resaca, náuseas y vómitos
Existe un componente que recibe el nombre de acetaldehído que se encuentra en algunos alimentos de consumo básico como el pan, las frutas y las bebidas oxidadas y que también es un subproducto de la oxidación del alcohol. Lo que resulta interesante es que nuestro hígado produce la misma sustancia cuando se oxida y descompone el alcohol (etanol). Este acetaldehído también descompone dos sustancias la principal llamada cisteína es un aminoácido que contiene azufre, existen evidencias que comprueban que el hígado utiliza de alguna forma ese azufre (que es el componente principal de los sulfitos) para descomponer los subproductos del alcohol. Esta cisteína está ayudando a nuestro cuerpo a producir un antioxidante natural (glutatión) que descompone las toxinas del alcohol; teniendo en cuenta que el organismo sólo puede procesar determinadas cantidades de alcohol a la vez, todo el alcohol no procesado se derrama alrededor del cuerpo y se producen síntomas como el dolor de cabeza, náuseas y vómitos como un intento de eliminar las toxinas.
Cansancio de resaca
Claro que en el momento consumir alcohol se relaciona con un efecto relajante que hace que la gente tienda a desinhibirse con mayor facilidad, sin embargo al día siguiente se presenta un agotamiento muy peculiar y este se da como un mecanismo de defensa del cuerpo y también porque el excesivo consumo de alcohol tiene un efecto depresivo en el sistema neurológico. También cuando dejamos de beber nuestro cuerpo intenta compensarlo y se crea un desequilibrio en la producción de glutamato, esto directamente impide que tengamos un sueño adecuado y relajante ya que se ven afectados los ciclos de sueño REM, que también afectan nuestra memoria y creatividad. Esto se deriva directamente en estados como el insomnio, extremo cansancio, dificultad para concentrarse, irritabilidad y estrés.
Deshidratación por resaca
Probablemente el síntoma infalible después de una noche de fiesta es la sed, todos sabemos que una de las principales consecuencias del consumo de alcohol es la deshidratación y es lo más normal despertarnos con muchísima sed. Es muy sabido que la deshidratación presenta algunos síntomas como es el caso de los molestos dolores de cabeza, también el alcohol inhibe una importante hormona cerebral llamada vasopresina que tiene el papel principal de retener el agua en el cuerpo y contraer los vasos sanguíneos, por lo tanto los líquidos que consumimos pasan directamente a los riñones y vejiga el cuerpo no la absorbe y se producen la sed y deshidratación.
Consejos para mitigar los efectos de la resaca:
- Recuerda que todo se trata de las cantidades que consumimos, de hecho en forma moderada la ingesta de alcohol aporta algunos efectos benéficos ya que actúa como anticoagulante, aumenta el colesterol bueno, reduce el malo y disminuye el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares. Una gran ventaja del consumo de vino es que es rico en potasio, por lo que ayuda a procesar la sal y es un potente antioxidante que se asocia con puros efectos buenos para el funcionamiento del organismo.
- Aprende a conocer tu cuerpo y presta mucha atención al tipo de alcohol que consumes, sobretodo a los síntomas que presentas ya que en muchas ocasiones podemos ser intolerantes a algunas variantes o componentes.
- Bebe con moderación y en períodos prolongados, siempre con alimentos ya que ayudan a disminuir la absorción del alcohol dando más tiempo para que el hígado haga su trabajo. Recuerda que procesamos media botella de vino, es decir tres copas en cuestión de 5 horas promedio.
- Siempre acompaña el consumo de alcohol con abundante agua, recuerda que perdemos aproximadamente medio litro de agua con cada vaso de vino y también es una buena manera de evitar los malestares posteriores.
- Evita beber alcohol al menos 2 horas antes de dormir, esto permitirá que el cerebro se vaya calmando de la estimulación que causa.
- Procura elegir vinos de calidad, es un mundo fascinante y una buena alternativa para disminuir los molestos síntomas.