Abuelo de Torrance: “Me dio coraje que metan el tema del racismo entre mi nieto y yo”
Mujer llamó a la Policía y acusó a un abuelo latino de secuestro solo por el color de su piel
LOS ÁNGELES – Mientras Abel Mata guardaba unas cosas en su auto el último fin de semana se percató de que dos patrullas de la Policía de Torrance, ciudad del área de Los Ángeles, llegaron a su casa.
“Una se estacionó delante de mi auto y otra atrás. Yo todavía me dije: ‘¿Quiero ver qué es lo que está pasando?’ Y luego [me di cuenta] que el problema era conmigo”.
Cuenta que grande fue su sorpresa al enterarse que alguien lo había acusado de haber secuestrado a un menor.
“[Los agentes] me preguntaron si yo andaba cargando un niño…, y yo les dije que sí…, que era mi nieto. Luego me explicaron que alguien les había llamado para decir que había un señor latino con un niño blanco y que lo había secuestrado”, cuenta Mata a La Opinión.
El menor, Milo, de 2 años de edad, es en efecto nieto de Abel Mata, quien es oriundo de Sonora, México, y que este 30 de agosto se preparaba para llevar al pequeño al parque.
El hombre de 57 años de edad agrega que luego del pequeño interrogatorio llevó a los agentes a la casa para que vieran al niño, quien en ese momento estaba con su esposa.
¿Quién lo acusó?
Mata agrega que en ese momento se dio cuenta que en la calle se encontraba una señora blanca como de más de 60 años que le gritaba que él había secuestrado al pequeño.
“Señora, usted es una racista. ¿Solamente porque me ve latino con un niño blanco piensa eso?”, le respondió.
Mata agrega que la mujer que lo acusaba también llevaba con ella “una katana… Eso que usaban los samuráis”.
Explica que cuando le pidió a los agentes que se fijaran en lo que la mujer llevaba, ellos le respondieron que se iban a encargar de eso después.
No obstante, Athena Mata —quien es hija de Abel y madre de Milo— dijo a La Opinión que cuando su papá intentó presentar cargos contra la mujer que lo acusó y que además llevaba un arma, le dijeron que no se podía hacer nada.
“Cuando mi papá les llamó, [la policía] le dijo que ella no había hecho nada malo…”.
Agrega que la Policía le explicó que la denuncia no procedía porque la espada estaba cubierta. Es decir, dentro de su funda.
“Ella le estaba gritando [a mi papá] con la espada en la mano. En mi opinión, lo estaba amenazando”, agrega Athena. En entrevista telefónica, indica que su mayor preocupación es que la mujer es blanca y que aunque tenía una espada no hubo consecuencias para ella.
“Si hubiera sido una persona de color le hubieran disparado y hubiera muerto…”, comenta.
“Andar con una espada en su estuche es legal, pero al parecer para la Policía es ilegal que un mexicano cargue a un bebé blanco”.
Ya es suficiente
Abel Mata logró grabar parte de la visita de los agentes y su hija lo colocó en la plataforma Tik Tok. En pocas horas, las imágenes se hicieron virales en las redes sociales.
Don Abel Mata, quien llegó a Estados Unidos los 5 años de edad y que se hizo ciudadano de este país a los 18, dice que lo ocurrido le dio mucho coraje que metan el tema del racismo entre él y su nieto.
“Quisiera que no juzguemos a la gente que es diferente a nosotros. A lo mejor tenemos familia que no se mira como uno o esposas o esposos que no es lo tradicional… Creo que debemos respetar”, expresa y agrega que es por esta razón que decidió hacer público su caso.
Por su parte, su hija confiesa que cuando le llamaron para contarle lo ocurrido pensó que se trataba de una broma pero que luego se puso a llorar.
“Estaba en shock, empecé a manejar de regreso a casa para ver si veía a la mujer o podía hablar con la Policía porque obviamente era algo racial”.
Athena, quien es hija de un padre latino y una madre blanca, comentó que aunque de pequeña se dieron ciertos incidentes —como alguna vez que sus compañeros le preguntaron si don Abel era en realidad su papá, ya que ella también se ve blanca, dijo— nunca había pasado algo tan grande como llegar a llamar a la Policía por algo relacionado a su hijo.
Indica que la relación de su padre con su pequeño Milo es muy cercana ya que pasan mucho tiempo juntos. Incluso, indica Athena, llegaría a decir que su hijo prefiere estar más con su abuelo que con cualquier otra persona en el mundo. “[Milo] adora a mi papá”.
Al preguntarle qué le expresaría a la comunidad al ver este tipo de incidentes que involucran el tema de la raza, Athena dice que “les diría que paren. [Mi hijo] Milo es nativo americano, mexicano, blanco y filipino. Todos estamos mezclados”, dice.
Reconoce que hay muchas personas que no quieren tener una conversación acerca de que el racismo ocurre: “Mucha gente se siente incómoda con este tema pero si tú te sientes así imagina cómo se siente la gente que es discriminada”.
“Porque me veo blanca no lo he sentido, pero lo he visto con mi papá y es muy doloroso… Ahora tenemos una enfermedad matándonos, necesitamos amarnos sin importar cómo nos veamos. Lo último que debería estar en nuestras mentes, es cuál es el color de tu piel”.
La Opinión intentó obtener un comentario del Departamento de Policia de Torrance, pero hasta el cierre de esta edición, no obtuvo respuesta.