En espera de refugio; hay quien ha esperado hasta dos años
Cientos de migrantes acampan en la frontera con la esperanza que el gobierno de Biden les brinde asilo.
Centenares de migrantes llegaron este domingo a acampar indefinidamente en la frontera en espera de información para pasar a solicitar refugio a California.
“El presidente Joe Biden dijo que va a dejar pasar a 25 mil migrantes que estaban en el programa ‘Permanecer en México’ para que soliciten asilo, pero hay decenas de miles que no estaban en ese programa”, dijo a La Opinión el pastor Albert Rivera, del albergue Ágape de Tijuana.
“Entonces, como el presidente Biden aumentó a 100,000 el número de refugiados que aceptará este año, los migrantes no se van a querer mover de aquí hasta que vean si los consideran para aceptarlos como refugiados”, dijo el pastor.
En la garita peatonal El Chaparral, en Tijuana, los migrantes se anotaban en “el libro”, un cuaderno de contabilidad en el que escribían sus datos conforme llegaban a Tijuana para que les dieran un número con el que eran llamados para presentarse ante autoridades fronterizas a exponer sus peticiones iniciales de asilo.
“El libro” contiene los datos de miles de personas que quedaron a la espera cuando el gobierno suspendió el programa “permanecer en México” por la pandemia.
“Estaban anotados pero no alcanzaron a entrar al programa, pero los migrantes dicen que ese cuaderno tiene un orden que debe respetarse ahora que pudieran pedir que los acepten como refugiados”, comentó Rivera.
“El libro” fue una idea de los migrantes. Lo guardaba extraoficialmente el Instituto Nacional de Migración de México como apoyo a los migrantes. Todos los días, un migrante elegido por mayoría, y que se rotaba por turnos, lo pedía a los agentes mexicanos, anotaba los datos de nuevos migrantes, y luego lo regresaba a los oficiales.
Un oficial al que preguntó La Opinión sobre ese cuaderno dijo no estar autorizado para declarar, pero comentó que personalmente no lo ha visto. Presuntamente estaría inactivo desde marzo.
El director del albergue Casa de Luz, Irving Mondragón, informó por su parte a La Opinión que este fin de semana personas no identificadas sugirieron comenzar un nuevo libro “y empezaron a pedir sus datos a los migrantes que estaban aquí en ese momento”.
La voz se corrió rápidamente y la madrugada de este domingo ya varias familias de migrantes amanecieron en tiendas improvisadas de campaña a la espera de poderse anotar.
La directora del albergue Espacio Migrante, Paulina Olvera Cáñez, dijo temer que los desconocidos puedan usar indebidamente los datos de los migrantes que sí estaban inscritos en “permanecer en México”.
A una coalición de grupos de derechos humanos y ayuda a migrantes, “se nos ha dicho que esta es una primera fase en la que solo van a cruzar la frontera quienes estaban en el programa y se quedaron con sus casos abiertos”, dijo la dirigente, “tal vez en otra fase posterior se vean los casos (del mismo programa) que las autoridades cerraron, por cualquier razón”.
Dijo que lo único que se sabe hasta ahora es que en esta fase inicial solo cruzan la frontera los migrantes que tenían casos abiertos en “permanecer en México” cuando el presidente Biden lo canceló el mismo día que asumió el cargo.
Enfatizó que la única forma de inscribirse para cruzar en la primera fase es mediante un portal llamado del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur).
Sin embargo, sobre posibles oportunidades para los migrantes que no estaban en el programa, “todavía no se ha dicho nada”, comentó.
Esos migrantes que quedaron en el limbo migratorio en la frontera “ya se sienten desesperados”, dijo el pastor Rivera, “hay muchos que ya tiene un año y medio, casi dos años”.
“Lo que más nos preocupa es que ahora nosotros ya nos quedamos así, después de casi dos años, nada más nos dejan aquí a ver qué va a pasar, y así nomás en estos días pueden llegar miles más ¿y cómo van a saber las autoridades (de Estados Unidos) quienes acaban de llegar y quiénes ya estábamos?”, cuestionó Rosaura, madre de familia hondureña.
“Por eso nos venimos a quedarnos aquí, aunque sea a dormir en cartones, pero no nos queremos ir sin que nos anoten o nos digan qué vamos a hacer”, explicó.
Migrantes de Casa de Luz mientras tanto se organizaban para llevar al campamento improvisado una estufa portátil y utensilios de cocina para tratar de alimentar de manera prioritaria a niños y mujeres.
Olvera Cáñez dijo temer que, en medio de la desesperación de los migrantes, haya quienes se aprovechen.
“Sabemos que a algunos les han pedido sus números del programa ‘Permanecer en México’ e información muy confidencial, que ni sus abogados les han pedido, como los nombres de sus familiares y sus direcciones en sus países de origen”, dijo.
El programa, que impuso la anterior administración a México en enero del 2019, llegó a enviar a ciudades de la frontera mexicana a 69,000 migrantes a esperar resultados a sus peticiones de asilo.
En el último recuento de organizaciones, en diciembre, se calculó que solo quedan unas 22,000 personas del programa, pero había otras decenas de miles de migrantes sin inscribirse en ese programa.