Descubre cómo hacer que la ley de la atracción funcione en la vida real para lograr tus objetivos

La ley de la atracción es un concepto muy popular en corrientes del pensamiento positivo que se usa para ayudarte a manifestar lo que quieres en la vida. Es la energía que tú mismo emanas y, en conjunto con el universo, funciona como un imán de lo que deseas con todas tus fuerzas y empuja hacia donde quieres estar.

Al ser una de las leyes del universo es imparcial, es decir, actúa de manera natural sin importar que seamos conscientes de ella o no. Por ejemplo, si tus pensamientos y acciones están encaminadas a la diversión, el optimismo, el positivismo y la riqueza eso es lo que obtendrás del universo, y si únicamente piensas en negatividad, pobreza y fracaso, evidentemente es lo que el cosmos te pone en el camino.

El libro de Rhonda Byrne ‘El secreto’ fue el que popularizó este concepto y ahí describió cómo funciona. En general, dice que nuestras acciones y pensamientos generan una frecuencia (alta o baja) que se envía al universo y este nos devuelve nuevos sentimientos y eventos bajo esa misma frecuencia vibratoria, por eso si actuamos bien atraemos el bien, y si obramos mal, el mal. En resumen, es la capacidad que tiene la mente de influir en eventos y circunstancias de la vida.

Cómo aplicar la ley de la atracción paso a paso

En diversos portales online de autoayuda y superación se explica cómo aplicar la ley de la atracción y cada uno tiene su propio método, sin embargo, tienen algunas coincidencias, las cuales, a continuación resumimos para ti.

Paso 1: Separa lo que quieres de lo que no quieres
Todos los días le pedimos cosas al universo consciente o inconscientemente. Lo que pensamos, sentimos, expresamos y hacemos el universo lo recibe y devuelve de la misma manera. Por eso es importante tener claro qué deseamos y qué no para enfocar nuestras acciones en lo que sí queremos.

Una opción para establecer claramente esta idea es realizar una lista de dos columnas donde anotes en una lo que quieres y en la otra lo que no quieres. Al leerla todos los días tu mente sabrá exactamente qué es lo que deseas y con el tiempo se enfocará automáticamente en las cosas positivas.

Paso 2: Cambia tu forma de pensar
Es difícil dejar atrás pensamientos como “no puedo”, “no encuentro”, “nunca tendré”, “no soy bueno para” y demás frases negativas. La mayoría de las personas tendemos a imaginarnos lo peor, sin embargo, hay que entrenar a la mente para transformar lo negativo a positivo. Convierte los “no” en “sí” y cada frase negativa en afirmativa. Es un hábito que requiere práctica, pero recuerda que los beneficios serán muchos.

Paso 3: Visualiza lo que quieres
Una de las claves para que funcione la ley de la atracción es saber exactamente lo que quieres. Todos queremos ser felices, pero el concepto de felicidad es muy diferente en ti, en tus padres, hermanos, amigos o compañeros de trabajo. El universo necesita pistas para darte lo que deseas. Por ejemplo, si te hace feliz tener un auto nuevo visualiza dónde lo comprarías, el modelo, año, color exterior e interior, las llaves, imagina su olor y cómo te sentirías cuando lo manejes. Si enfoca tus acciones y pensamientos en ese objetivo el cosmos conspira para que se te cumpla

Paso 4: Cree en ti
Uno de los principales problemas es que carecemos de propia fe. Pensamos que no somos capaces de conseguir algo, lo cual, es incorrecto. A todos nos ha pasado que logramos superar nuestras propias expectativas, si conseguimos una calificación más alta, si conquistamos a la persona de nuestros sueños, si logramos un ascenso o estar en la empresa que queríamos. Piensa en los éxitos que has tenido en tu vida y lo que sentiste en ese momento para que sean tu motivación.

Paso 5: Agradece lo que tienes y lo que tendrás
Por último, debes ser consciente de lo que tienes en el presente. Lo que tienes y eres ahora será diferente a lo que tendrás y serás mañana. Disfruta el camino hacia tus objetivos y vive en el hoy sin miedo a saber qué pasará al día siguiente. Agradece todas y cada una de las cosas que posees ahora, por más pequeñas que sean y agradece lo que te dará el universo mañana.

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