Demócratas vuelven a incluir la licencia familiar y médica remunerada en el plan de gasto social tras el fuerte golpe electoral

La presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, anunció este miércoles que su partido ha vuelto a incluir la licencia para cuidar a un hijo recién nacido o un familiar enfermo y la licencia por enfermedad en el plan de gasto social de $1.75 billones de dólares impulsado por el presidente Joe Biden.

Esta medida es una de los más relevantes de la agenda de Biden, que avanza lentamente en el Congreso ante las dificultades por alcanzar acuerdos dentro del propio Partido Demócrata.

El anuncio de Pelosi de recuperar la licencia, tras ser eliminada hace días durante las negociaciones en el Congreso, se produce sólo horas después de conocerse los malos resultados de los demócratas en las elecciones del martes en Virginia, Nueva Jersey y otros lugares.

Pero su inclusión en el proyecto final dependerá de que se alcance un acuerdo con el senador Joe Manchin, demócrata por Virginia Occidental, cuyo apoyo es clave ante la ajustada mayoría de este partido en el Senado y el rechazo total de los republicanos.

“He pedido al Comité de Medios y Arbitrios que incluya en su sesión de esta mañana su legislación para la licencia familiar y médica remunerada”, explicó Pelosi en una carta, “su presidente, Richie Neal ,y el personal del Comité han trabajado en esta prioridad durante mucho tiempo y estaban preparados” para abordarla”.

La propuesta contempla cuatro semanas de permiso remunerado, según dijeron a NBC News dos fuentes conocedoras del tema que hablaron bajo anonimato.

La medida fue retirada del plan la semana pasada cuando Manchin planteó sus objeciones. Según explicó a la prensa, no creía que el formato del plan social, que sería aprobado como un proyecto de ley de reconciliación presupuestaria, deba utilizarse para aprobar una propuesta política importante como el permiso remunerado.

Manchin pidió a la Cámara que votara primero el proyecto de ley de infraestructuras, que destinaría $555,000 millones de dólares a proyectos como carreteras y puentes, y que retrasara la votación del plan del gasto social, conocido como Build Back Better.

“Vamos a conseguir hacer algo”, dijo, “pero sigo creyendo en mi corazón, con la incógnita que tenemos ahora, que deberíamos haber esperado. No vamos a esperar. Ese barco ha zarpado. Lo entiendo”.

Por Teaganne Finn, Ali Vitali y Sahil Kapur – NBC News