“¡Tira golpes! Sabías que iba a ser una guerra”: Así alentaba su esquina a Alejandra Ayala en la pelea en que la noquearon antes de quedar en coma

La “Fenix” Ayala recibió un duro castigo en el último episodio de su pelea contra Hannah Rankin, pero nadie de su equipo perdió la esperanza de que saliera avante, aunque nunca se imaginaron el desenlace

Alejandra Ayala

Alejandra Ayala. Crédito: Getty Images

El viernes pasado Alejandra “Fénix” Ayala perdió más que los cinturones superwelter de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) y la Organización Internacional de Boxeo (OIB), ya que perdió por nocaut técnico en el último round y fue trasladada a un hospital donde tuvo que ser inducida al coma.

Pese a este lamentable desenlace, de acuerdo al reporte del diario local AM, que tuvo acceso al video de la función completa, la boxeadora dio una buena pelea durante los primeros tres rounds, pero fue perdiendo fuerza y a partir del séptimo ya no fue rival para su similar Hannah Rankin.

Aún con todo en contra, la boxeadora mexicana de 33 años de edad nunca dejó de recibir el aliento de su esquina, que aumentaba los gritos conforme la pugilista perdía posibilidades de victoria.

Según el medio, el noveno round fue clave en la debacle de Ayala, ya que allí la pelea se convirtió en un monólogo de la escocesa.

“¡Tira golpes, síguela, vamos Ale, tú puedes! Ya sabías que iba a ser una guerra, a eso venimos. Estás preparada. Sube la guardia”, se escuchaban las instrucciones que provenían de la esquina de la “Fénix” en el cierre del penúltimo asalto.

Para el último episodio, se intensificó el castigo para la oriunda de la Ciudad de México radicada en Tijuana, así como el impulso de su esquina.

“¡Vamos, Ale, a cerrar fuerte! Es el último round, hay que llevarnos ese cinturón a Tijuana”, gritaba su entrenador.

Conforme los golpes impactaban más la humanidad de Alejandra, las esperanzas de la victoria se iban esfumando, pero no la intensidad de los gritos, que cada vez se escuchaban con mayor desesperación.

¡Suelta golpes, tira golpes! Ya te cansaste… te van a parar la pelea. ¡Tira golpes, chingao!”, fue lo último que se escuchó desde la esquina antes de que el réferi interviniera para decretar el nocaut técnico.

Ante la decisión, la mexicana pareció no reaccionar, no protestó y tardó varios minutos en abandonar el ring, aunque al final lo hizo por su propio pie, pero se le veía afectada, por lo que fue trasladada en ambulancia a un hospital cercano a la sede de la pelea en Glasgow, Escocia. 

Más tarde se informó sobre la lamentable noticia: Alejandra Ayala entró en un coma inducido y hasta el momento suma dos intervenciones quirúrgicas a causa de un hematoma subdural, según informó ESPN.

La última actualización sobre el estado de la pugilista es que sigue en coma, pero estable.

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