Tormenta masiva azota la costa oeste de Alaska con inundaciones y fuertes vientos
De momento no hay informes de heridos o muertes relacionadas con la tormenta hasta el sábado por la noche, de acuerdo con el mayor general Torrence Saxe, de la Guardia Nacional de Alaska
El agua permanecerá rondando los niveles máximos hasta por 24 horas en algunas zonas, según autoridades. Crédito: Getty Images
Una poderosa tormenta que barrió el norte a través del Estrecho de Bering provocó inundaciones generalizadas en varias comunidades costeras del oeste de Alaska, cortando el suministro eléctrico y obligando a los residentes a huir a terrenos más altos.
La fuerza del agua movió algunas casas de sus cimientos, y una construcción en Nome flotó río abajo hasta que quedó atrapada en un puente.
La potente tormenta, lo que queda del tifón Merbok, ha estado influyendo en los patrones climáticos en lugares tan lejanos como California, donde se esperaban fuertes vientos y una rara tormenta de lluvia a fines del verano.
En Alaska, no se reportaron heridos ni muertos de inmediato, dijo Jeremy Zidek, portavoz del Departamento de Seguridad Nacional y Manejo de Emergencias de Alaska. Las autoridades habían advertido que algunos lugares podrían sufrir las peores inundaciones en 50 años y que las aguas altas podrían tardar hasta 14 horas en retroceder.
El gobernador Mike Dunleavy emitió una declaración de desastre durante el día.
El frente de tormenta de casi 1,000 millas dañó carreteras y posiblemente otra infraestructura, dijo Dunleavy en una conferencia de prensa el sábado por la noche. Los funcionarios evaluarán cualquier efecto en los sistemas de agua y alcantarillado, malecones, áreas de almacenamiento de combustible, aeropuertos y puertos.
Los representantes de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias ya estaban en Alaska antes de la tormenta y Dunleavy dijo que se quedarán para ayudar a evaluar los daños.
“Nuestro objetivo es hacer las evaluaciones lo antes posible”, dijo. “Vamos a actuar lo más rápido que podamos para brindar alivio, brindar recuperación, brindar los elementos esenciales que la gente necesita”.
Entre las comunidades más afectadas se encuentra Golovin, un pueblo de unos 170 habitantes que en su mayoría buscaron refugio en una escuela o en tres edificios en una ladera. Los vientos en el pueblo soplaron a más de 60 mph y el agua se elevó 11 pies por encima de la línea de marea alta normal y se esperaba que subiera otros 2 pies el sábado antes de llegar a la cima.
“La mayor parte de la parte baja de la comunidad está inundada de estructuras y edificios”, dijo Ed Plumb, meteorólogo del Servicio Meteorológico Nacional en Fairbanks.
Clarabelle Lewis, la administradora de las instalaciones del gobierno tribal, la comunidad esquimal de Chinik, se encontraba entre los que buscaron refugio en la colina que domina Golovin. Ella y otras personas estaban sobrellevando la tormenta en la oficina tribal después de proteger los artículos de sus casas de los fuertes vientos y ayudar a los vecinos a hacer lo mismo.
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