Seguro médico para mascotas: 3 cosas que debes saber antes de comprar uno en EE.UU.

Tener una mascota puede significar un costo alto para sus dueños, sobre todo cuando se trata de gastos veterinarios; sin embargo, contratar un seguro médico para mascotas puede ser una ayuda, pero hay cosas que se tienen que saber.

Un seguro médico para mascotas, como otros seguros, puede dar una cierta seguridad financiera en caso de una emergencia y un apoyo médico para la mascota, sea un perro o un gato o cualquier animal legal que se dedica tener en casa.

Sin embargo, la seguridad médica y financiera que un seguro médico para mascotas puede dar, conlleva ciertas diferencias que el contratante debe tener en cuenta, pues su funcionamiento es diferente a los de un seguro médico, de auto o de casa.

Hay algunas cosas que se deben tener en cuenta para maximizar la utilidad de un seguro médico para mascotas y que pueden evitar sorpresas para quienes hagan una contratación.

Tres cosas a saber antes de contratar un seguro médico para mascotas

1.- Enfermedades preexistentes no están en cobertura

Antes de contratar el seguro médico de una mascota es recomendable conocer el estado de salud de la mascota, pues una parte importante que se debe tener en cuenta antes de contratar uno es que las enfermedades preexistentes no están dentro de una cobertura.

Algunos seguros pueden cubrir ciertos padecimientos preexistentes; sin embargo, la mayoría de las enfermedades que ya existían no estarán cubiertas por la cobertura médica contratada.

La recomendación de los expertos es que si se ha pensado contratar un seguro médico para una mascota, lo mejor es empezar lo más pronto posible, ya sea que el animal acabe de llegar al hogar o que tenga algunos años.

Entre más joven sea la mascota, menos costosa puede resultar, el monto de una prima es más bajo y la cobertura es potencialmente más amplia, esto porque si en el futuro las mascotas tienen alguna enfermedad, ya tendrán la cobertura garantizada.

2.- La atención se tiene que pagar, al principio

Una de las grandes diferencias que existen entre los seguros médicos para personas y los de mascotas es la manera en que se hacen los pagos cuando se necesita una atención médica.

Cuando se hace uso de un seguro médico, las personas están acostumbrados a cubrir copagos y en ciertos casos, el pago de ciertas facturas; sin embargo, cuando se trata de seguros para mascotas, el pago es de inmediato.

Eso quiere decir que, al llevar a una mascota al veterinario, el dueño se tiene que hacer cargo del pago inmediato de los costos médicos, aunque esto es de un pago temporal, por lo que necesitará aprovechar ahorros o tarjetas de crédito.

Para hacer efectivo el seguro, el dueño de la mascota deberá presentar un reclamo para obtener un reembolso del dinero gastado, de acuerdo con los términos de la póliza.

3.- Unos animales son más baratos que otros

La decisión de tener uno u otro animal como mascota no tiene que ver con el costo de su manutención; sin embargo, en algunos casos, el presupuesto sí tiene que ver en la definición.

En este caso, la diferencia entre las dos mascotas más comunes, los gatos y los perros, puede ser de hasta $1,500 dólares entre el primero y el segundo, en cuanto a la contratación de un seguro médico, de acuerdo con Money.com.

De acuerdo con los costos del mercado, un seguro médico para un perro varía entre $30 y $70 dólares al mes, mientras que para un gato puede costar entre $15 y $40 dólares al mes.

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