El Departamento de Defensa anuncia el envío de 800 soldados más para evitar el cruce de ilegales en la frontera con México
La estrategia consiste en sellar las zonas más vulnerables por donde diariamente ingresan indocumentados con el objetivo de convertirse en residentes permanentes
Con el objetivo de frenar el arribo de inmigrantes ilegales a través de la frontera sur, el gobierno informó sobre el envío de 800 soldados para reforzar las zonas más vulnerables de ingreso al territorio estadounidense.
Los integrantes de las fuerzas armadas se enfocarán en tareas de “logística y otras funciones en la frontera para permitir que más agentes y oficiales de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) regresen a su misión y responsabilidades principales”, señala parte de un comunicado.
De acuerdo con datos del Departamento de Defensa, hasta el momento cerca de 2,500 elementos de la Guardia Nacional estatal apoyan al Departamento de Seguridad Nacional (DHS) para tratar de sellar el paso fronterizo de México hacia la Unión Americana.
Asimismo, la Casa Blanca señala que otros 24,000 agentes y oficiales de CBP, así como cerca 2,600 oficiales no uniformados, también trabajan en varios puntos que conectan con el vecino del sur.
Cabe señalar que luego de la revocación del Título 42, iniciativa política mediante la cual los agentes de la patrulla fronteriza estaban facultados para rechazar a los inmigrantes ilegales en la frontera bajo el argumento de la crisis sanitaria ocasionada por la pandemia de Covi-19, el flujo de personas con intenciones de ingresar al territorio estadounidense presuntamente se redujo en algunos puntos durante los últimos meses.
Sin embargo, en estados como Texas cientos de personas se dieron a la tarea de cruzar la frontera, pues el gobierno estatal le ofrecía transportación directa hacia ciudades consideradas santuario como son New York, Los Angeles e incluso Chicago.
En respuesta, el gobierno federal anunció varias medidas enfocadas en evitar que el fenómeno migratorio provoque un desequilibrio económico en los estados de mayor concentración de nuevos ilegales.
De hecho, en New York la gobernadora Kathy Hochul recientemente declaró que ya no hay espacio para recibir a más personas ilegales, pues los albergues y hoteles acondicionados para darle techo y alimentación lucen abarrotados.
En este sentido, la mejor alternativa del gobierno federal consiste en sellar los pasos fronterizos con el apoyo de las fuerzas armadas. Sin embargo, la estrategia surge con meses de retraso, pues miles de indocumentados arribaron al país con el objetivo de quedarse.
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