Bebés en riesgo: crecen tasas de sífilis congénita en EE.UU.
Las tasas de sífilis transmitidas de madres a bebés en los Estados Unidos alcanzaron 77 casos por cada 100,000 nacidos vivos en 2021, mientras que el Reino Unido notificó solo 11 casos en cinco años entre 2014 y 2019
Los defensores de la salud están haciendo un urgente llamado a la administración Biden para declarar una emergencia de salud pública debido al alarmante aumento de los casos de sífilis congénita en el país. Esta infección, que es tratable, ha experimentado un aumento asombroso del 500% en la última década, lo que plantea serias amenazas para los recién nacidos.
La sífilis congénita se manifiesta cuando un bebé adquiere la infección de su madre. Sin un tratamiento adecuado, hasta el 40% de los bebés nacidos de madres no tratadas no sobreviven o nacen muertos. Aquellos que sobreviven a menudo enfrentan defectos congénitos graves, como daño óseo, anemia, ceguera, sordera y “devastación neurológica”.
David Harvey, director ejecutivo de la Coalición Nacional de Directores de Enfermedades de Transmisión Sexual (ETS), ha subrayado la necesidad de abordar este problema con urgencia, afirmando que “no debería haber un solo bebé nacido en los Estados Unidos con sífilis”. Además, destacó que la sociedad y el país en su conjunto serán juzgados de manera severa si permiten que esto continúe, considerando que la enfermedad es fácil de diagnosticar, tratar y prevenir.
El alarmante aumento de las tasas de sífilis coincide con la escasez de suministros del medicamento preferido para tratarla, conocido como Bicillin LA. Pfizer es el único fabricante de este medicamento, que es una forma de penicilina, el primer antibiótico sintetizado. La empresa ha advertido que no espera que la escasez se resuelva antes de 2024 y atribuye en parte esta situación al aumento de los casos de sífilis.
Esta escasez ha llevado a los líderes de salud pública a tomar la incómoda decisión de priorizar el medicamento casi exclusivamente para pacientes embarazadas. El Bicillin LA es el único tratamiento seguro conocido para la sífilis durante el embarazo y es esencial tanto para la madre como para el feto. Incluso las personas con alergias a la penicilina recibirán el medicamento después de ser sensibilizadas por un alergólogo.
El aumento de ITS no tiene que ver con la pandemia
David Harvey hizo hincapié en que esta crisis es un reflejo directo de un sistema de salud pública debilitado en los Estados Unidos, con tasas de infecciones de transmisión sexual entre las más altas en el mundo industrializado occidental.
La sífilis es solo una de las infecciones de transmisión sexual (ITS) que el gobierno rastrea, incluyendo la clamidia, la gonorrea y el VIH, todas las cuales están en aumento. Entre 2020 y 2021, en medio de las perturbaciones causadas por la pandemia, los casos de sífilis congénita aumentaron un 30.5%.
Este aumento no se puede atribuir únicamente a la pandemia. A principios de la década de 1990, la sífilis estaba prácticamente erradicada, pero ha resurgido en un contexto de financiamiento estancado y aislamiento en la salud pública.
En respuesta a esta crisis, David Harvey ha instado a la administración Biden a declarar una emergencia de salud pública y a utilizar la Ley de Producción de Defensa para aumentar la producción de Bicillin LA en los Estados Unidos. Además, una coalición de 38 organizaciones de salud pública ha solicitado al grupo de trabajo sobre escasez de medicamentos de la Casa Blanca que investigue la escasez.
El Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) ya ha establecido un grupo de trabajo federal dedicado a liderar una respuesta nacional de salud pública contra la sífilis y la sífilis congénita. El grupo se centra en abordar cuestiones interrelacionadas, reducir las tasas de infección y promover la equidad en salud, y está brindando asistencia técnica y otros recursos a las áreas más afectadas del país.
La Casa Blanca, por su parte, se ha centrado en fortalecer las cadenas de suministro críticas y ha emitido cinco órdenes ejecutivas con el objetivo de lograrlo. Sin embargo, los funcionarios de salud pública en las regiones más afectadas creen que se necesita una acción más contundente, ya que este aumento de casos podría ser solo el principio.
En 2021, las tasas de sífilis congénita en los Estados Unidos alcanzaron 77 casos por cada 100,000 nacidos vivos, mientras que el Reino Unido notificó solo 11 casos en cinco años entre 2014 y 2019, el año más reciente del que hay datos disponibles. Estos números subrayan la gravedad del problema en los Estados Unidos en comparación con otros países.
Además, la tasa promedio nacional de los Estados Unidos oculta las notables disparidades regionales en la incidencia de la sífilis congénita. Los estados en el suroeste y el sur profundo, donde el acceso a la atención médica es más limitado, presentan tasas significativamente más altas en comparación con otras regiones.
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