Infusiones de ketamina: qué son y cómo puede mejorar la ansiedad
El informe forense de Los Ángeles destaca la conexión de la ketamina con circunstancias trágicas aún no reveladas. Mientras la droga muestra promesas en el tratamiento de la depresión, la preocupación por su uso indebido y efectos secundarios persiste, generando un debate en la comunidad médica sobre su regulación y seguridad
Estudios han demostrado mejoras significativas en los síntomas de pacientes que reciben infusiones de ketamina. Crédito: luchschenF | Shutterstock
La oficina forense del condado de Los Ángeles ha revelado detalles sorprendentes sobre la trágica muerte del aclamado actor Matthew Perry, conocido por su papel en la icónica serie ‘Friends’.
El informe de autopsia fechado el 15 de diciembre ha revelado que la estrella de 54 años fue víctima de lo que han denominado los “efectos agudos” de la ketamina, una droga catalogada como ‘no narcótica de lista III’.
El actor fue encontrado inconsciente en el jacuzzi de su lujosa residencia de Los Ángeles el 28 de octubre, flotando boca abajo en el extremo calentado, según informaron los medios locales. El informe forense señala que el ahogamiento, la enfermedad de las arterias coronarias y los efectos de la buprenorfina, un opioide, fueron factores contribuyentes a su trágica muerte.
La ketamina, conocida comúnmente como una droga utilizada en la medicina como anestésico general, ha estado en el centro de la polémica recientemente debido a sus supuestos beneficios en el tratamiento de la depresión, ansiedad e ideación suicida.
Según Medical News Today, estudios han demostrado mejoras significativas en los síntomas de pacientes que reciben infusiones de ketamina, aunque su uso para estos fines no está aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA).
Mientras que algunos médicos han recetado ketamina “fuera de etiqueta” para tratar condiciones como la depresión resistente al tratamiento, su consumo recreativo también ha sido motivo de preocupación. La droga, conocida por sus propiedades alucinógenas, puede sedar a una persona, incapacitarla y provocar pérdida de memoria a corto plazo.
Un estudio reciente analizado por CNN revela que, en el contexto del tratamiento de la depresión resistente al tratamiento, la ketamina ha mostrado resultados prometedores. Investigadores examinaron datos de 424 personas tratadas entre noviembre de 2017 y mayo de 2021 en tres clínicas de infusión de ketamina en Virginia, especializadas en pacientes con ideas suicidas, depresión o ansiedad.
Los resultados del estudio indicaron que después de seis semanas de tratamiento, el 50 por ciento de los participantes mostró una respuesta positiva al tratamiento, y el 20 por ciento experimentó una remisión completa de los síntomas depresivos. Después de 10 infusiones, las tasas de respuesta y remisión aumentaron al 72 por ciento y 38 por ciento, respectivamente.
A pesar de estos hallazgos alentadores, los expertos advierten sobre la necesidad de recopilar más información sobre los posibles efectos adversos de la ketamina para prevenir su uso indebido. El informe de CNN señala que, aunque los investigadores no evaluaron sistemáticamente los efectos secundarios, estudios anteriores no han encontrado efectos secundarios permanentes o a largo plazo en la memoria o la función cognitiva.
La ketamina está en el centro de un debate más amplio sobre la psiquiatría y el tratamiento de enfermedades mentales. Aunque ha mostrado eficacia en casos específicos, los expertos subrayan la necesidad de entender completamente sus efectos a largo plazo y sus posibles riesgos. La FDA aún no ha aprobado su uso como tratamiento estándar para la depresión, y la comunidad médica continúa explorando la mejor manera de aprovechar sus beneficios potenciales mientras minimiza los posibles peligros.
La muerte de Matthew Perry destaca la importancia de abordar las cuestiones de salud mental de manera integral y de continuar investigando y debatiendo sobre las terapias y medicamentos que podrían marcar la diferencia en la vida de aquellos que luchan contra enfermedades mentales.
A medida que la investigación avanza, es fundamental equilibrar la esperanza de tratamientos innovadores con una comprensión profunda de sus posibles consecuencias, para garantizar la seguridad y el bienestar de quienes buscan alivio de sus desafíos mentales.
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