Trump recurre al nombre de pila de Nikki Haley para evidenciar su falta de arraigo por EE. UU.

Donald Trump se dirigió a Nikki Haley empleando su nombre de pila con el objetivo de evidenciarla ante sus seguidores por su presunta carencia de arraigo hacia la nación a la cual emigraron sus padres procedentes de la India.

Nimarata Nikki Randhawa tomó el apellido de su marido Michael Haley después de casarse y para fortalecer su popularidad en la política también se despojó de su nombre de pila al hacer campaña hasta llegar a convertirse en la primera gobernadora de Carolina del Sur.

Basado en ello, Trump sostiene que la única mujer que participa en el proceso para definir la candidatura del partido conservador no tiene los argumentos necesarios para aspirar a gobernar a la nación.

“Cualquiera que haya escuchado el loco discurso de Nikki ‘Nimrada’ Haley pensaría que ganó las primarias de Iowa. No lo hizo, y ni siquiera pudo vencer a un Ron DeSanctimonious muy imperfecto, que se ha quedado sin dinero y sin esperanza”, escribió en la plataforma Truth Social.

Aunque la también exembajadora ante la Organización de las Naciones Unidas nació en Bamberg, Carolina del Sur, y es ciudadana estadounidense, desde hace tiempo el magnate neoyorquino sostiene que no puede postularse a la presidencia porque sus padres no eran ciudadanos estadounidenses en el momento de su nacimiento.

De hecho, la estrategia empleada por el político de 77 años resulta similar a la que empleó en el pasado en contra de Barack Obama al poner en duda que su nacimiento fue en Estados Unidos.

Incluso, al hacer referencia del nombre completo del exmandatario afroamericano en los eventos suele mencionarlo como Barack Hussein.

De acuerdo con algunos analistas, Donald Trump ya empieza preocuparse del repunte que ha tenido la campaña de la mujer a quien a señalado por “tener cerebro de pájaro”, esto después de darse cuenta que en el caucus de Iowa ya logró desplazar a Ron DeSantis y se colocó como la segunda opción en la boleta república.

De hecho, la prueba de fuego para Nikki Haley prácticamente llamando a la puerta, pues en las primarias de New Hampshire se definirá el destino de su campaña.

Con el respaldo del gobernador Chris Sununu y ya sin Chris Christie en el horizonte, Haley confía en que dará la sorpresa de vencer a Trump en el Granite State, pues de lo contrario sus aspiraciones para pelearle a los demócratas la Casa Blanca se verían seriamente afectadas, ya que  perdería credibilidad ante los ojos de los ciudadanos.

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