Sicario del Cártel de Sinaloa revela si Los Chapitos en verdad prohibieron la producción de fentanilo o no

Desde que las autoridades estadounidenses pusieron la mira en las organizaciones criminales que producen y trafican con fentanilo, el mapa del narcotráfico en México se modificó.

Así lo revela el sitio Insight Crime, al señalar que los “cocineros”, es decir, las personas encargadas de fabricar el fentanilo en laboratorios clandestinos, emigraron del estado de Sinaloa a otras regiones del país para poder seguir operando.

Esta acción se debió, principalmente, al veto que impusieron los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán para producir la peligrosa droga en territorio sinaloense, bajo amenaza de muerte para quienes no obedecieran.

Sin embargo, parece que dicha prohibición no aplicó a todos los traficantes de fentanilo, tal como lo reveló un sicario del Cártel de Sinaloa entrevistado por Insight Crime.

“Nos dijeron que matáramos a cualquiera que siguiera produciendo fentanilo… Solo hay unos pocos elegidos cercanos a los jefes que pueden producir”, declaró el pistolero.

Desde que se dio dicha orden, a mediadios de 2023, los grupos de sicarios bajo las órdenes de Los Chapitos han matado a decenas de “cocineros” que no obedecieron, aunque los casos han disminuido durante los últimos meses.

Muchos emigraron a otros estados

“No hemos matado a nadie aquí en Culiacán en los últimos tres meses”, dijo el pistolero, lo que sugiere que los pocos “cocineros” que quedan en la ciudad podrían estar siguiendo la orden, mientras que otros han optado por huir.

Esta hipótesis fue confirmada por Insight Crime al contactar a un productor independiente de fentanilo, quien aseguró que muchos de ellos emigraron a los estados de Sonora y Baja California.

“Nos están ofreciendo 20,000 pesos (1,200 dólares) por kilo para cocinar fentanilo en Mexicali. Allí hay menos costos y es más fácil cruzar la frontera”, indicó.

Pero el entrevistado detalló que esa cantidad no se compara con los 3,500 dólares que su equipo ganaba por kilogramo que producían en 2020 en las montañas que rodean Culiacán.

Si bien la prohibición del fentanilo y la creciente presión de los gobiernos estadounidense y mexicano contra los miembros del Cártel de Sinaloa han puesto en peligro una de las principales fuentes de ingresos del grupo, las personas entrevistadas por InSight Crime pronosticaron un resurgimiento de la producción de fentanilo en Sinaloa.

“Todo ha cambiado”, dijo una persona encargada de negociar los envíos de fentanilo a Estados Unidos. “Nadie tiene permiso [para producir fentanilo], pero algunas personas cercanas a los jefes siguen en laboratorios bien escondidos en lo más profundo de la sierra de Sinaloa”, añadió.

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