Cómo están vinculados los trastornos del sueño y suicidio
La falta crónica de sueño está vinculada a un mayor riesgo de ideación suicida, según advierten expertos en salud mental. Reconocer los signos de problemas de sueño y buscar ayuda son pasos cruciales para proteger la salud mental
Es crucial reconocer los signos comunes de la falta de sueño, que incluyen dificultades para concentrarse, recordar y regular las emociones. Crédito: Gladskikh Tatiana | Shutterstock
La falta de sueño es un problema común que afecta a millones de personas en todo el mundo. A menudo, se subestima su impacto en la salud mental, pero según advierten expertos, un sueño deficiente y crónico puede tener consecuencias más graves de lo que se piensa. Investigaciones recientes sugieren una conexión preocupante entre los trastornos del sueño y el riesgo de ideación suicida.
Según datos recopilados, el 42% de los estadounidenses han expresado preocupaciones sobre su salud mental, y aproximadamente el 18% ha experimentado pensamientos suicidas en algún momento durante el último año. Estas cifras reflejan una tendencia alarmante que requiere una atención inmediata.
El Dr. Michael Parsons, experto en salud mental, enfatiza que el suicidio es un fenómeno complejo que rara vez tiene una causa única. Más bien, es una convergencia de diversos factores, donde los problemas de sueño pueden desempeñar un papel significativo.
El estrés prolongado, problemas financieros, traumas pasados y trastornos psicológicos como la depresión y el abuso de sustancias son solo algunos de los factores que pueden aumentar el riesgo de suicidio.
El sueño inadecuado afecta negativamente a funciones críticas como la toma de decisiones, la regulación emocional y la resiliencia. Además, puede contribuir al desarrollo de enfermedades cardíacas, diabetes tipo 2 y trastornos mentales como la depresión y la ansiedad, todos los cuales están vinculados al riesgo de suicidio.
Parsons destaca que una persona que ha descansado adecuadamente está mejor preparada para enfrentar los desafíos de la vida, manejar el estrés y mantener una actitud positiva. Mejorar la calidad del sueño también puede reducir la impulsividad y la desregulación emocional, ambos factores asociados con un mayor riesgo de suicidio.
Prevención
Los signos de tendencias suicidas relacionadas con el sueño pueden manifestarse a través de cambios repentinos en el comportamiento, como problemas para conciliar el sueño o dormir en exceso. Además, el aislamiento social, acciones imprudentes o un aumento en el consumo de sustancias son señales de advertencia adicionales que no deben pasarse por alto.
Es crucial reconocer los signos comunes de la falta de sueño, que incluyen dificultades para concentrarse, recordar y regular las emociones. La combinación de problemas de sueño y dificultades para regular las emociones puede llevar a una toma de decisiones deficiente y a una capacidad reducida para hacer frente al estrés.
Los expertos recomiendan que los adultos duerman entre siete y nueve horas por noche, mientras que los niños y adolescentes necesitan aún más. Para aquellos que luchan con problemas de sueño, se aconseja buscar tratamiento y adoptar hábitos de higiene del sueño saludables.
Si alguien muestra signos de ideación suicida, es fundamental buscar ayuda de inmediato. Se puede contactar con la Línea de Vida de Crisis y Suicidio llamando o enviando un mensaje de texto al 988. Es esencial que las personas se conecten con el apoyo y los recursos disponibles lo antes posible para mejorar su bienestar mental y aumentar su resiliencia.
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