Joaquín Guzmán López, hijo de “El Chapo”, se declara “no culpable” de narco

Joaquín Guzmán López, alias "El Güero", se declaró "no culpable" de cargos por narcotráfico, lavado de dinero y liderar un grupo criminal

La acusación contra Joaquín Guzmán López fue dada a conocer en 2023.

La acusación contra Joaquín Guzmán López fue dada a conocer en 2023. Crédito: Departamento de Justicia | AP

Joaquín Guzmán López, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán, se declaró “no culpable” en la Corte de Distrito Norte de Chicago, Illinois, donde enfrenta cargos de narcotráfico.

“El Güero”, como también se le conoce a Guzmán López, también es representado por el abogado Jeffrey Lichtman, quien reconoció que su cliente enfrenta cadena perpetua por los delitos que incluyen tráfico de drogas, liderar una organización criminal, manejo de armas y lavado de dinero.

En su comparecencia para conocer los delitos que enfrenta, Guzmán López vestió el uniforme de recluso color naranja e iba encadenado.

“El Güero”, a quien no le gustaba relacionarse con otros narcos, también reconoció que recibe atención por problemas de tiroides y presión arterial alta.

Joaquín Guzmán López, de 38 años, fue detenido en El Paso, Texas, junto a Ismael “El Mayo” Zambada, uno de los fundadores y líderes del Cártel de Sonaloa, quien enfrenta un proceso en El Paso, Texas.

Los cargos contra “El Güero” se integran en la misma acusación contra sus hermanos Ovidio Guzmán López, alias “El Ratón”, e Iván Archivaldo Guzmán Salazar.

Los tres son referidos también como “Los Chapitos”, “Los Menores” y “Los Chiquillos”), quienes habrían coordinado “sus actividades de narcotráfico para importar a México grandes cantidades de cocaína desde países de América Central y del Sur, incluidos Colombia, Ecuador, Venezuela, Perú, Panamá, Costa Rica, Honduras y Guatemala”.

Gran parte de esa droga –cocaína, heroína, metanfetaminas, marihuana– indica la acusación, tuvo a EE.UU. como destino final.

La acusación agrega que “Los Chapitos” tomaron control de la facción que lideraba su padre enfrentando a Dámaso López Núñez, alias “El Lic”, quien luego fue testigo en el juicio a “El Chapo”.

Después de la última captura y extradición a EE.UU. de “El Chapo”, en 2017, Joaquín Guzmán López y sus hermanos avanzaron en el grupo criminal y pronto enfocaron sus negocios criminales en la producción de fentanilo.

La DEA los señaló como los principales productores de esa droga que se vende en EE.UU., donde las adicciones han provocado miles de sobredosis relacionadas con fentanilo.

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