Retiran del mercado casi 10 millones de libras de pollo listos para consumir por riesgo de listeria
Una infección causada por listeria es la tercera causa principal de muerte por enfermedad transmitida por alimentos en los Estados Unidos
BrucePac, un productor de productos cárnicos y avícolas listos para consumir, retiró del mercado más de 9.9 millones de libras de producto debido a una posible contaminación con listeria, anunció el miércoles el Departamento de Agricultura.
Los alimentos incluyen productos como tiras de pechuga de pollo a la parrilla que se elaboraron en las instalaciones de la empresa en Durant, Oklahoma. Se produjeron entre el 19 de junio y el 8 de octubre y se enviaron a restaurantes, proveedores de servicios de comida y otros lugares de todo el país, dijeron funcionarios del gobierno.
Sin embargo, la lista de productos retirados del mercado se compone principalmente de ensaladas preparadas, burritos y wraps que contienen pollo, a veces junto con otras carnes, como tocino o jamón.
BrucePac, un productor de carnes y aves precocidas, inició el retiro el miércoles después de que los productos analizados por el Servicio de Inspección y Seguridad Alimentaria del Departamento de Agricultura arrojaran resultados positivos para la bacteria Listeria monocytogenes.
Una investigación posterior determinó que el pollo listo para comer de la empresa con sede en Oklahoma era la fuente de la contaminación, y BrucePac y el Departamento de Agricultura han proporcionado desde entonces más información y actualizaciones sobre los productos afectados en particular.
Las infecciones por listeria suponen el mayor riesgo para las personas mayores, con sistemas inmunitarios debilitados o embarazadas.
La listeriosis es la tercera causa principal de muerte por intoxicación alimentaria en los EE. UU., según la Administración de Alimentos y Medicamentos. Se estima que 1,600 personas contraen la listeriosis cada año y que aproximadamente 260 mueren por la enfermedad. Es más probable que la infección enferme a mujeres embarazadas y sus recién nacidos, adultos de 65 años o mayores y personas con el sistema inmunitario debilitado.
Los síntomas suelen presentarse unas dos semanas después de ingerir el alimento contaminado, aunque pueden aparecer de forma bastante inmediata o tardar hasta diez semanas en aparecer. Suelen incluir fiebre, dolores musculares, dolor de cabeza, rigidez del cuello, confusión, pérdida del equilibrio y convulsiones.
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