La campaña de Kamala Harris gastó más de $1,000 millones de dólares y terminó en números rojos

La campaña de la demócrata Kamala Harris presuntamente se gastó hasta el último centavo de la cifra récord de dinero que recaudó en tan sólo tres meses

Kamala Harris, vicepresidenta en funciones

El próximo mes, el equipo de campaña de Kamala Harris deberá presentar un reporte de ingresos y gastos ante Comisión Federal Electoral. Crédito: Jacquelyn Martin | AP

De acuerdo con reportes preliminares, la campaña de Kamala Harris gastó los más de $1,000 millones de dólares que recaudó mediante donativos y cerró con números rojos.

A pesar de que será hasta el mes entrante cuando el equipo de asesores de la vicepresidenta en funciones le entregue un informe detallado sobre sus operaciones a la Comisión Federal Electoral, ha comenzado a filtrase parte de la información.

Con varias facturas pendientes por pagar, sobre todo de gastos que se efectuaron cerca del cierre de campaña, el equipo de la excandidata demócrata enfrenta un déficit de $20 millones de dólares.

Sin embargo, Patrick Stauffer, director financiero de la campaña de Harris, emitió un comunicado donde aseguró que “no había deudas pendientes ni facturas vencidas” el día de las elecciones y que “no habrá deudas” al dar por concluido de manera oficial todo el proceso de campaña una vez que se rindan cuentas.

Si bien el poder de recaudación de Kamala Harris logró reunir una cifra de dinero nunca antes vista en una campaña presidencial, la premura con la cual irrumpió en escena para relevar a Joe Biden obligó a sus asesores a gastar millonarias sumas en campañas de publicidad con el objetivo de posicionarla lo mejor posible.

Basado en ello, Kamala Harris llegó a estar por delante de Donald Trump durante un lapso de la carrera por la Casa Blanca.

Los gastos de campaña de Kamala Harris se traducen más de $1,000 millones de dólares conseguidos a través de donaciones. (Crédito: Carlos Osorio / AP)

No obstante, después de su participación en el debate frente a Trump, la campaña de Harris dejó de crecer, esto a pesar de los eventos donde se presentó al lado de iconos de la industria del entretenimiento como la conductora de televisión Oprah Winfrey o con la cantante Beyoncé.

Algunos especialistas atribuyen las grandes sumas de dinero gastadas a lo costoso que resultó la producción de mítines en escenarios como La Esfera, vanguardista inmueble construido en Las Vegas, Nevada.

“Gracias a la incomparable destreza de la vicepresidenta Harris para recaudar fondos, pudimos implementar una agresiva estrategia que abarcó todo lo anterior para llegar a los votantes, manteniendo los siete estados en disputa increíblemente cerca”, expresó el director financiero de la campaña.

Hasta mediados de octubre, se sabía que en las arcas de la campaña demócrata habían $119 millones de dólares, los cuales presuntamente se invirtieron en publicidad.

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