Volkswagen se reinventa: aquí sus ambiciosos planes al 2026
Volkswagen se prepara para una transformación significativa tras años de altibajos. La marca alemana promete mejoras radicales en diseño, calidad y eficiencia
Tras un período marcado por incertidumbres y decisiones cuestionables, Volkswagen se encuentra en plena reestructuración para recuperar el liderazgo que alguna vez definió su trayectoria.
Lee también: Volkswagen invierte $5,800 millones en Rivian: los detalles
Bajo la dirección de Oliver Blume, y con Kai Grünitz a cargo de la investigación y desarrollo, la marca alemana ha trazado una hoja de ruta ambiciosa que busca rediseñar su identidad, optimizar su gama de vehículos y superar los desafíos que han lastrado su desempeño en el sector eléctrico.
Puedes leer: El Volkswagen Tiguan 2025 debuta con un interior premium
Grünitz, en una entrevista reciente con Autocar, detalló los planes de la compañía para los próximos años. Desde la mejora sustancial de su línea ID hasta el desarrollo de plataformas revolucionarias como la SSP, Volkswagen apunta a un futuro más competitivo.
Esta estrategia incluye no solo una evolución técnica y estética de sus modelos, sino también una redefinición de los valores que han hecho de Volkswagen una marca querida en el pasado.
Una nueva identidad para los eléctricos de Volkswagen
El camino hacia la reinvención no ha sido sencillo. Los primeros modelos eléctricos de Volkswagen, como los de la gama ID, han enfrentado críticas relacionadas con su calidad, diseño y eficiencia. Reconociendo estas deficiencias, Grünitz anunció que, a partir de 2026, los eléctricos de la marca recibirán “enormes mejoras”.
Aunque los modelos actuales mantendrán su esencia, los futuros lanzamientos presentarán una línea creativa completamente nueva, inspirada en el concepto ID.2All.
Esta nueva identidad visual busca reflejar los valores originales de Volkswagen: accesibilidad, diseño atractivo y calidad confiable. Según el propio Grünitz, el objetivo es que los clientes perciban un cambio significativo, uno que sea “mucho mayor de lo esperado”.
También, Thomas Schäfer, director general de la marca, aseguró que Volkswagen está decidido a recuperar su estatus como una marca “querida” en todo el mundo.
El ID.2All y la apuesta por la accesibilidad
Uno de los proyectos más esperados es la versión de producción del ID.2All, que estará basada en la nueva plataforma MEB Entry. Este modelo promete combinar un diseño innovador con una accesibilidad económica que lo posicione como un referente en el mercado de vehículos eléctricos compactos. Se espera que su presentación tenga lugar entre finales de 2025 y principios de 2026, seguida por una variante SUV que debutará en el Salón de Múnich.
Además, Volkswagen confirmó que el ID.GTI, una versión deportiva del ID.2All, también estará listo para 2026. Este modelo, junto con su versión SUV, consolidará la estrategia de electrificación de la marca en el segmento de vehículos compactos y accesibles.
La plataforma SSP: el futuro de la ingeniería automotriz
Uno de los proyectos más ambiciosos de Volkswagen es el desarrollo de la plataforma SSP (Scalable Systems Platform). Esta estructura modular pretende ser un pilar para la marca a largo plazo, capaz de sustentar una amplia variedad de vehículos, desde modelos urbanos hasta superdeportivos eléctricos.
Para su desarrollo, Volkswagen ha encontrado en Rivian un socio estratégico clave.
La colaboración entre ambas empresas se oficializó recientemente mediante la creación de una empresa conjunta. Mientras Volkswagen aporta su experiencia en fabricación de alta calidad, Rivian contribuye con su innovación en tecnología y software, áreas donde la empresa estadounidense ha demostrado ser más ágil y eficiente.
Grünitz destacó que esta alianza combina “lo mejor de ambos mundos” y permitirá a Volkswagen acelerar su transición hacia la nueva era de la movilidad eléctrica.
Una estrategia para superar los desafíos
Volkswagen no oculta que esta transformación es crucial para superar su situación actual. Con una competencia feroz, tanto en Europa como en mercados como China, la marca debe adaptarse rápidamente para no perder relevancia.
La inversión en tecnología, diseño y asociaciones estratégicas son parte de una estrategia integral para volver a capturar la confianza y lealtad de los consumidores.
En palabras de Grünitz, el objetivo final es que los clientes “sientan que Volkswagen ha cambiado de verdad”. Este cambio, aseguran, no solo se reflejará en los productos, sino también en la percepción global de la marca como un actor innovador y comprometido con el futuro sostenible.