Directora de campaña de Kamala Harris niega que, al rechazar entrevistas, haya evitado exponerla

Jen O’Malley Dillon, quien se desempeñó como directora de la campaña presidencial de Kamala Harris, rechazó de manera rotunda la versión de que a la vicepresidenta se le haya evitado ofrecer entrevistas a los medios informativos con el objetivo de no exponer su presunta incapacidad para responder frente a ciertos temas políticos.

Desde que Kamala Harris fue sugerida por Joe Biden para relevarlo como candidata presidencial demócrata, un amplio sector de la prensa señaló que no estaba capacitada para gobernar a la nación.

De hecho, los detractores de la afroamericana de 60 años fundamentaron sus señalamientos en al menos tres episodios públicos donde previamente emitió declaraciones bastante desafortunadas o fuera de contexto.

Posteriormente, la controversia en torno a su persona se incrementó después de que recurrentemente eludió hablar ante la prensa y sólo seleccionó a unos cuantos medios informativos para promover su campaña, pero sin tocar temas complejos.

Dicho comportamiento fue interpretado como una estrategia para evitar poner en riesgo su sueño de convertirse en la primera mujer en gobernar al país.

Sin embargo, durante su intervención en el podcast “Pod Save America”, la estrega política Jen O’Malley Dillon rechazó por completo dicha especulación.

“Pienso que deberíamos haber señalado más de nuestra estrategia desde el principio sobre los podcasts y a quiénes llegar, pero teníamos una cantidad de tiempo limitada.

Enfrentarse a una narrativa de que no estábamos haciendo nada o que teníamos miedo de dar entrevistas es una completa tontería“, expresó.

No obstante, la responsable directa de los resultados conseguidos por Kamala Harris aceptó que las críticas infundadas quedaron grabadas en la mente de algunos ciudadanos y eso se reflejó al momento de votar.

“La gente real escuchó de alguna manera que no íbamos a tener entrevistas, lo cual no era cierto y eso fue un problema“, subrayó.

A la postre, los resultados de las elecciones determinaron que el equipo de Kamala Harris se equivocó en algún punto de una campaña que previo al debate presidencial había sido exitosa, al menos en cuanto la recaudación de donaciones, pues rebasó más de $1,500 millones de dólares en aportaciones, dinero que en su totalidad se gastó en publicidad.

Sigue leyendo:

• Kamala Harris les pide a los ciudadanos “no permitir que nadie les quite el poder”

• John Morgan, megadonante demócrata, descalifica a Kamala Harris para volver a hacer campaña

• La campaña de Kamala Harris gastó más de $1,000 millones de dólares y terminó en números rojos