Informe revela que algunos empleados federales viven a más de 2,000 millas de su oficina presencial

Una investigación desarrollada durante año y medio por Joni Ernst, senadora por Iowa, dio como resultado la presentación de un informe donde se revela que algunos empleados federales están abusando del trabajo a distancia, pues además de que no laboran tiempo completo, en ciertos casos, lo hacen a más de 2,000 millas de distancia de la que debiera ser su oficina presencial incluso percibiendo salarios más altos al lugar donde en realidad habitan.

Desde hace tiempo, la republicana de 54 años ha manifestado su rechazo hacia el teletrabajo, pues lo considera insano para las finanzas del gobierno.

“La capital de la nación es una ciudad fantasma, con edificios gubernamentales con una tasa de ocupación promedio del 12%.

Si no se puede encontrar a los empleados federales en sus escritorios, ¿dónde están exactamente?” cuestiona la férrea ciudadana de Iowa.

Personal bajo las órdenes de Joni Ernst, trabajó durante meses en colaboración con Open the Books, grupo sin fines de lucro enfocado en difundir la transparencia gubernamental para los contribuyentes.

Los datos obtenidos resultan oro molido para el naciente Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), pues bajo la dirección conjunta de Elon Musk y Vivek Ramaswamy pretende recortar los gastos innecesarios del gobierno desapareciendo departamentos enteros e incluso agencias y secretarias consideradas ineficientes.

Como parte de sus hallazgos, Joni Ernst menciona casos de trabajadores federales que perciben salarios más altos de localidades donde en realidad no trabajan desde hace meses e incluso años.

“Mis auditorías están descubriendo que entre 23 y 68 % de los empleados que trabajan a distancia en algunas agencias aumentan sus salarios al recibir un pago local incorrecto.

Algunos empleados viven a más de 2,000 millas de su oficina y un teletrabajador ‘temporal’ cobró un pago local más alto durante casi una década”, enfatizó.

Quizá de ahí deriva el hecho de que la administración federal a fin de no hacer más grande la controversia se haya negado a revelar desde donde trabajan más de 281,000 empleados federales de base, esto de acuerdo con Open the Books.

Otro dato controversial es que la Oficina de Gestión de Personal de Estados Unidos descubrió cómo, más de la cuarta parte de los empleados federales beneficiados por el trabajo remoto, ya viven a más de 50 millas de su oficina presencial.

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