Anthony Jolie tuvo el mejor año de su carrera
Su nuevo álbum tiene una mezcla de pop, latino urbano y merengue
Por la mente de Anthony Jolie nunca pasó la idea de dedicarse a otra cosa que no fuera la música. Comenzó con clases de guitarra a los 9 años, un primo era bajista y tocaba con bandas de bachata y merengue —y Anthony era como su sombra—, y además, vivía a cinco minutos caminando de uno de los mejores estudios de grabación del Lower Side de Manhattan, en Nueva York.
“Nuna me fui de aquí”, dijo Anthony el día de esta entrevista, que ofreció, precisamente, en el fabuloso estudio al que llegó siendo niño y que ahora usa para grabar sus canciones.
Conoció a los dueños y a los ingenieros desde pequeño porque acompañaba a su primo bajista a grabar con las bandas que lo contrataban. Ahora, el ingeniero principal del local es mentor de Anthony y el resto del personal es como su familia.
Sus inicios en la música fueron primero como parte de un dúo que formó con su primo, quien murió a los 24 años debido a problemas del corazón con los que nació. Juntos, además de artistas, eran productores y desarrollaron proyectos de música urbana y reguetón.
Luego, cuando Anthony se quedó solo, siguió su camino de forma independiente; se graduó de la carrera de música y grabación de sonido y regresó a los estudios de su barrio para hacer sus prácticas profesionales.
“Luego empecé a escribir y producir para otros”, dijo. “También para el pop estadounidense; nunca paré”.
Hasta que decidió que ya era tiempo de perseguir su objetivo, que era convertirse en cantante.
“Invertí muchos recursos, mucho tiempo como productor y como compositor para otros artistas”, dijo.
En ese momento llegó la pandemia y muchos cantantes con los que estaba trabajando o que estaba administrando no quisieron continuar con sus carreras, y Anthony perdió el impulso de seguir produciendo.
“Pero yo siempre tuve en mi mente tener mi propio proyecto”, dijo el cantante de ascendencia dominicana.
Entonces aprovechó la coyuntura, se fue a Puerto Rico unos meses y escribió el que ahora es su nuevo álbum, que tiene una mezcla de pop, latino urbano y merengue. Ya estrenó varios cortes de los once que incluye el disco, entre ellos “12.7”, “Perrito caramelo”, “Humilde pa’ qué” y el más reciente “Extraños de nuevo”.
“Este ha sido un año muy productivo”, dijo Anthony, quien usa el Jolie en honor a Angelina Jolie, su actriz favorita. “He crecido en mis redes sociales y en audiencia, como compositor y productor he tenido éxito, y muchos mánagers, artistas y disqueras me han contactado para que trabaje con ellos; ha sido el mejor año de mi carrera”.
En el verano tendrá conciertos en Nueva York y espera que también en muchas otras partes del mundo. Y si hay tiempo, también producirá un EP con canciones que ya lanzó en español pero que ahora tendrán una versión inglés.