Gripe aviar: granja de Long Island obligada a sacrificar más de 100,000 patos
Detectan gripe aviar en una granja de patos en Long Island, Nueva York. Más de 100,000 patos serán sacrificados como medida de contención. Riesgo público bajo
Recomiendan medidas como evitar el contacto directo con aves enfermas, notificar avistamientos de mortalidad y seguir las pautas de higiene Crédito: Jaclyn Vernace | Shutterstock
La detección de gripe aviar en una granja comercial de patos en Long Island, Nueva York, ha obligado a las autoridades a tomar medidas drásticas para contener el brote. Crescent Duck Farm, ubicada en Aquebogue, a unos 106 kilómetros al este de la ciudad de Nueva York, enfrenta la dolorosa tarea de sacrificar más de 100,000 patos luego de confirmarse casos positivos del virus el pasado 17 de enero. Esta granja, la última operación comercial de su tipo en Long Island, se ha visto forzada a cesar todas sus actividades mientras se lleva a cabo el proceso de eutanasia, que se espera tome más de una semana.
El Departamento de Salud del condado de Suffolk informó que el propietario de la granja notó signos de enfermedad en el rebaño la semana anterior, lo que llevó a una rápida intervención sanitaria. Según el comisionado de salud del condado, el Dr. Gregson Pigott, no había alternativa más segura que sacrificar a toda la población avícola. “Cuando hay un brote en un rebaño, la única solución es eliminarlo completamente para evitar la propagación del virus”, explicó Pigott.
Por el momento, no se han reportado infecciones entre los trabajadores de la granja. No obstante, las autoridades están tomando precauciones para proteger su salud. Los empleados que tuvieron contacto cercano con las aves infectadas están siendo evaluados, y a aquellos considerados de alto riesgo se les ha ofrecido medicamentos antivirales como Tamiflu y Tamivir. Además, se han implementado estrictas medidas preventivas, que incluyen la capacitación del personal en higiene y el uso de equipos de protección personal adecuados.
A pesar de la gravedad del brote, los funcionarios de salud aseguran que el riesgo para el público general es bajo. Según Pigott, “no hay evidencia actual de que el virus sea transmisible entre humanos”. Sin embargo, destacó la posibilidad de transmisión limitada del virus H5N1 de aves infectadas a individuos expuestos directamente, motivo por el cual la investigación y el monitoreo continúan.
La gripe aviar no es un fenómeno nuevo en los Estados Unidos. Desde abril de 2024, el virus ha causado brotes en varias regiones del país, afectando aves de corral y ganado lechero. Hasta ahora, se han confirmado 67 casos humanos en 10 estados, pero la mayoría han sido leves, con pacientes que se recuperaron completamente. La única muerte registrada ocurrió en Luisiana, donde un paciente mayor de 65 años con problemas de salud preexistentes sucumbió a la enfermedad.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) han reiterado que no hay evidencia de transmisión sostenida de persona a persona, y el riesgo para la población en general sigue siendo mínimo. Sin embargo, instan a los trabajadores agrícolas y otros sectores de riesgo a tomar precauciones adicionales.
El brote en Crescent Duck Farm destaca la fragilidad de las operaciones comerciales de aves frente a la influenza aviar. En una declaración reciente, los funcionarios del condado de Suffolk enfatizaron la importancia de fortalecer las prácticas de bioseguridad en granjas para prevenir futuras infecciones. Mientras tanto, la comunidad local espera que este incidente no afecte drásticamente la producción avícola de la región.
Los intentos de ABC News de contactar a Crescent Duck Farm y obtener más información sobre el impacto económico del brote no recibieron respuesta inmediata. Por ahora, las autoridades y los trabajadores de la salud se centran en mitigar las consecuencias del brote y evitar su propagación a otras áreas del estado.
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