Así se fortalece la memoria al estimular los sentidos
De acuerdo a distintos estudios, activar los sentidos mediante diferentes estímulos incide positivamente en la capacidad de recordar y asimilar información

El olfato es considerado uno de los sentidos más potentes para la memoria por su vínculo directo con el sistema límbico Crédito: Pexels
La estimulación sensorial puede potenciar la memoria de manera significativa, y esta conexión está sólidamente respaldada por la neurociencia, estudios empíricos y la experiencia de profesionales. La clave reside en cómo nuestro cerebro procesa y consolida la información cuando se involucran múltiples vías sensoriales.
Según diversos estudios, al activarse los distintos sentidos cuando experimentamos un estímulo, el cerebro crea una representación más rica y detallada de ese evento, lo que fortalece el recuerdo desde su origen.
Por qué la activación sensorial nos ayuda a recordar
La relación entre el incremento de la memoria y la estimulación de los sentidos, se basa en varios mecanismos neuronales y cognitivos:
- Atención y codificación: la doctora Rachel Herz, neurocientífica cognitiva y autora de “The Scent of Desire“, enfatiza que “cuanta más atención prestes a algo —y la atención es multisensorial—, más se refuerza la información que estás codificando”.
- Múltiples conexiones sensoriales: al asociar un recuerdo con varios sentidos (vista, oído, olfato, tacto, gusto), se establecen múltiples “puntos de entrada” neuronales para acceder a esa información. Si una vía sensorial específica no es accesible, otras pueden activar el recuerdo.
- Conexión con el sistema límbico: el procesamiento de los estímulos sensoriales ocurre en el sistema límbico, una región cerebral vital para las emociones y la memoria. Esta conexión directa explica por qué olores, sonidos o sensaciones específicas pueden evocar recuerdos y emociones intensas de manera casi instantánea.
- Formación y consolidación de vías neuronales: los recuerdos se forman a través de variaciones en la sensibilidad de la transmisión sináptica entre neuronas, lo que genera nuevas vías neuronales o facilita las existentes.
La estimulación multisensorial favorece estas conexiones, potenciando la capacidad de aprendizaje. La exposición a una amplia variedad de estímulos (visuales, auditivos, táctiles y kinestésicos) enriquece la percepción y fortalece las conexiones neuronales.

¿Qué papel juega cada sentido en el fortalecimiento de la memoria?
La capacidad de los distintos sentidos para evocar recuerdos y potenciar la memoria ha sido ampliamente estudiada con beneficios y variables específicas asociadas a cada uno.
Los detallamos a continuación.
- Olfato: es considerado uno de los sentidos más potentes para la memoria, dado su vínculo directo con el sistema límbico. Los recuerdos olfativos suelen ser más intensos y duraderos.
Investigaciones recientes como Effect of intensive olfactory training for cognitive function in patients with dementia” (Efecto del entrenamiento olfativo intensivo en la función cognitiva en pacientes con demencia) publicado en el Geriatrics & Gerontology International en 2022 ,evidenciaron que un entrenamiento olfativo riguroso provocó mejoras significativas en aspectos clave como la depresión, la atención, la memoria y las funciones del lenguaje.
- Vista: estimular el sentido de la vista con actividades que involucren la observación detallada de patrones, colores y texturas mejora la orientación, la percepción espacial y la capacidad de retener información visual, esencial para el aprendizaje de letras y números.
Una investigación de mayo de 2025 publicada en Cerebral Cortex utilizó imágenes por resonancia magnética funcional (fMRI, por sus siglas en inglés) en cientos de participantes para mapear las redes corticales visuales que alimentan al hipocampo con información sobre “qué” (objetos, caras) y “dónde” (escenas), mostrando cómo la información visual se canaliza para la creación de recuerdos.
- Oído: la memoria auditiva es crucial para el desarrollo del lenguaje y la comprensión. Escuchar música activamente, participar en conversaciones y juegos de sonidos, y usar audiocuentos fortalecen esta memoria, permitiendo una mejor discriminación de sonidos y procesamiento del lenguaje.

Un estudio de marzo de 2024, publicado como bioRxiv, profundizó en cómo el cerebro mantiene la memoria de trabajo auditiva, es decir, la capacidad de retener y manipular información sonora por cortos periodos. Utilizando la Estimulación Magnética Transcraneal (EMT) de pulso único combinada con análisis de patrones multivariados (MVPA) de EEG, los investigadores pudieron decodificar el contenido de la memoria auditiva incluso en estados cerebrales “silenciosos” (sin actividad aparente), sugiriendo que la información se mantiene en conexiones sinápticas.
- Tacto: La memoria háptica se activa a través del contacto y es fundamental para la integración sensorial, la coordinación y la motricidad. Actividades con diversas texturas mejoran la atención y el aprendizaje, siendo especialmente útiles en trastornos del procesamiento sensorial.
- Gusto: Las experiencias gustativas, al crear asociaciones entre sabores y situaciones, activan la memoria del sabor y pueden inducir memorias emotivas sólidas y duraderas. Probar y describir nuevos sabores contribuye al desarrollo cognitivo y a la creación de conexiones emocionales.
Una revisión de abril de 2025 en PMC profundiza en los mecanismos moleculares de la consolidación de la memoria gustativa en la corteza gustativa, destacando la importancia de la plasticidad sináptica. Esto significa que las conexiones neuronales en las áreas del gusto se modifican y fortalecen con las experiencias de sabor repetidas, especialmente aquellas asociadas con recompensas o aversiones, lo que nos permite aprender y recordar preferencias y rechazos alimentarios con precisión.
Otros usos y enfoques de la estimulación sensorial
Diversas organizaciones y expertos aplican los principios de la estimulación sensorial para mejorar la memoria en contextos educativos, terapéuticos y de la vida diaria.
- Atención consciente y mindfulness sensorial: prestar atención consciente a los detalles sensoriales de una experiencia es una técnica de mindfulness que potencia la memoria.
La Asociación Americana de Psicología (APA), por sus siglas en inglés) y el Mind & Life Institute promueven la práctica del mindfulness sensorial como una forma de mejorar la atención, lo que directamente impacta la capacidad de codificar y recordar información.
Observar activamente colores, escuchar texturas sonoras, oler aromas sutiles y sentir diferentes superficies enriquece el procesamiento de la memoria.
- En el ámbito educativo, la Organización Mundial para la Educación Preescolar (OMEP) y el Instituto Nacional para la Salud Infantil y el Desarrollo Humano (NICHD) respaldan el aprendizaje multisensorial.
Estas organizaciones coinciden en que actividades como la pintura con los dedos (que estimula tacto y vista), el juego con bloques (tacto, vista, comprensión espacial) o experimentos científicos prácticos (tacto, visual, auditivo) demuestran cómo la interacción multisensorial enriquece el aprendizaje y la memoria, especialmente en la infancia.
- Asociación y terapia de reminiscencia: la terapia de reminiscencia, a menudo utilizada en geriatría, se basa en la estimulación sensorial para evocar recuerdos. La British Psychological Society (BPS) ha destacado la eficacia de la reminiscencia, que a menudo incorpora estímulos sensoriales como música antigua, fotografías o la manipulación de objetos familiares, para mejorar la conexión con el pasado y el bienestar emocional en personas con deterioro cognitivo.