Estrés, ansiedad y miedo entre emprendedores de la ciudad de Santa Ana
Inmigrantes consideran que el color de la piel es el pasaporte para el arresto y deportación de los latinos

José Rodríguez es vendedor ambulante en Santa Ana. Crédito: Isaac Ceja | Impremedia
El estrés, la ansiedad y el miedo eran las emociones del emprendedor José Rodríguez, mientras se quedaba en casa porque estaba con la incertidumbre de lo que le podía pasar a él, sus amigos y familiares que no podían salir a trabajar por las redadas.
“El color de nuestra piel ya es el pasaporte para que te puedan arrestar y llevar sin preguntarte si tienes papeles o no”, dijo Rodríguez acerca de la situación que se vive el sur de California con las agencias migratorias.
Por suerte, un negocio local llamado “Alta Baja Market” apoyó a Rodríguez, que permaneció en casa por una semana sin trabajar. Personal del negocio ofrecía y vendía los productos de fruta de Rodríguez para apoyarlo.
No obstante y debido a la necesidad de dinero del vendedor ambulante, tuvo que salir nuevamente, esta vez con su esposa Socorro Rivas. Normalmente la pareja trabaja por separado, pero por la falta de clientes en el área están trabajando juntos, pero con un solo carrito.

Varios emprendedores en el centro de Santa Ana han notado una reducción en peatones y ventas desde que comenzaron las redadas de migración en el área de Los Ángeles.
Alejandra Vargas, copropietaria de Vibes Boutique, vio videos de agentes federales en el distrito de la moda en el centro de Los Ángeles hace unas semanas, y es precisamente el lugar donde ella se surte para su negocio.
“Me hizo sentir muy desconsolada porque esas son personas que nos ayudan y nos cuentan sus historias…”, dijo la emprendedora mexicana.
Vargas agregó que desde el comienzo de la construcción del nuevo tranvía y la pandemia en Santa Ana, los negocios han sufrido, pero ahora con las redadas la situación ha empeorado como nunca ya que el tráfico de peatones se redujo en un 80%.
Debido a la situación, Vargas ha pensado en romper su contrato de arrendamiento. Agregó que desafortunadamente otros locales en el centro de Santa Ana ya se han ido o han puesto sus negocio a la venta.
“Estamos pagando un precio muy alto por el alquiler y es genial por la comunidad que hemos construido, la gente que viene y las cosas que podemos hacer, pero al final del día, si no comemos, no vamos a poder darle nada a nadie”.
La emprendedora dijo que ha estado donando un porcentaje de las ventas en su local para apoyar a la comunidad migrante que no puede salir a trabajar durante este tiempo.
Afuera del negocio de Vargas, Natalie Castañeda y Tanya Narváez se sentaron en una mesa vendiendo dulces, algunos donados por Vargas.
“Te afecta cuando ves los videos de los vendedores ambulantes salir y ponerse en riesgo, exponerse sabiendo que la migra podría estar literalmente a la vuelta de la esquina y todavía están tratando de llegar a fin de mes”, dijo Castañeda.
“He visto algunos videos, lamentablemente, de algunos vendedores ambulantes que fueron apartados y sus carritos quedaron atrás. Eso me conmovió el corazón”.
Después de ver tantas personas en Los Ángeles y San Diego recaudar fondos, Castañeda decidió hacer lo mismo y el miércoles creó una campaña de GoFundMe para poder apoyar a los vendedores del condado de Orange.
Hasta la fecha, ha recibido más de 30 donaciones con lo que le compró a un vendedor de flores la mitad de su mercancía ($250) para que se pudiera ir a casa más temprano.
“No sé si otras personas sienten lo mismo, pero siempre hay algo que podemos hacer, incluso si es solo compartir los enlaces de GoFundMe en las redes, eso ya es una ayuda porque nunca se sabe quién más puede permitirse donar”, dijo la joven latina.
El vendedor ambulante Rodríguez compartió que las ventas han bajado un 70% durante este tiempo y a veces recibe donaciones aunque prefiere trabajar.
“Se me hace difícil aceptar donaciones porque lo primero es trabajar”, dijo Rodríguez. “En estos tiempos mucha gente necesita ayuda, no nada más yo”.
El concejal Johnathan Ryan Hernández, de la ciudad de Santa Ana, compartió que para el próximo mes presentará una propuesta en el concejo para ayudar a la comunidad migrante.
“Quiero colaborar con la oficina del administrador de la ciudad y con mis colegas a través de un proceso transparente donde podamos reunir públicamente una política que brinde ayuda mutua para pagar el alquiler, los servicios públicos y el gas con las subvenciones que tenemos…”, dijo el concejal, quien históricamente ha apoyado la comunidad migrante.
Hernández declaró que la ciudad de Santa Ana está presenciando la injusticia y la violencia estatal de cerca, y subraya que la comunidad debe reconocer sus derechos.
“Son jornaleros, jardineros, lavacoches, trabajadores de supermercados, pasajeros de autobús, niños, madres y, personas del barrio que son inofensivas y miembros ejemplares de la comunidad”, explicó el concejal, sobre las personas que han sido afectadas por la presencia de ICE.
“Muchas de estas personas llevan 25 años trabajando en estos autolavados, son dueños de casas y trabajan en la ciudad. Pero ahora se les trata como si no fueran de esta comunidad”.
A dónde llamar
El concejal Hernández destacó que cada persona en la comunidad tiene el derecho de grabar tanto a la policía local como los agentes federales.
Además, explicó que los miembros del público pueden llamar al (714)881-1558, la Red de Respuesta Rápida del Condado de Orange, en caso de que vean a una persona detenida por agentes federales.