Emergencia: Ford retira 700,000 autos por riesgo de incendio
Ford ha emitido una alerta masiva por un defecto en los inyectores de combustible de modelos Escape y Bronco Sport, que podría provocar incendios

Ford Escape. Crédito: Ford. Crédito: Cortesía
Sin pensarlo mucho, Ford Motor Company inició una retirada masiva de vehículos tras detectar un problema serio que compromete la integridad mecánica de miles de unidades en circulación.
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Más de 700,000 unidades de los modelos Ford Escape y Bronco Sport, fabricados entre 2020 y 2023, presentan un defecto en el sistema de inyección de combustible que podría derivar en incendios.
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Aunque la mayoría de las unidades afectadas circulan en Estados Unidos, también hay vehículos distribuidos en América Latina y Europa que podrían estar comprometidos.
¿Cuál es el problema con estos modelos?
El fallo detectado se centra en los inyectores de gasolina, que pueden presentar fisuras por donde se escapa el combustible. Las fugas pueden alcanzar partes calientes del motor, como el sistema de escape, generando un riesgo latente de incendio.
Ford ha recibido al menos 20 reportes de incidentes relacionados con esta falla, sin que hasta el momento se hayan reportado víctimas mortales. Sin embargo, la gravedad potencial de la situación ha llevado a tomar medidas inmediatas.
Los propietarios podrían identificar el problema por síntomas como olores a gasolina, humo inusual, pérdida de potencia, o dificultades para encender el motor. La compañía enfatiza que cualquier señal debe ser reportada de inmediato en un concesionario autorizado.
Modelos incluidos en el retiro
- 333,342 unidades de Ford Escape (2020–2023)
- 188,436 unidades de Ford Bronco Sport (2020–2023)
A nivel mundial, el total supera las 519,000 unidades, aunque la estimación real asciende a más de 700,000 vehículos si se suman otros lotes de producción y unidades vendidas fuera de EE.UU.
Así será la reparación
Ford ha desarrollado un protocolo de revisión y reparación gratuito para todos los propietarios de vehículos afectados. Cada usuario recibirá una notificación oficial con los pasos a seguir, pero se recomienda no esperar y actuar con antelación.
La marca está instalando en sus concesionarios un sistema de mitigación de fugas y, en los casos donde sea necesario, reemplazará completamente los inyectores. Además, se añadirá un sensor especial para detectar acumulaciones peligrosas de combustible en la zona del motor.
“Estamos comprometidos a resolver este problema de forma rápida y efectiva. Los trabajos de inspección no tendrán ningún costo para los clientes”, aclaró la compañía.

¿Qué debe hacer si tiene un Escape o Bronco Sport?
Si usted posee uno de estos vehículos fabricados entre 2020 y 2023, es importante que siga estos pasos:
- Verifique el VIN (número de identificación vehicular) en la web oficial de Ford o en la página de la NHTSA, para confirmar si su unidad está dentro del recall.
- Contacte un concesionario oficial Ford para agendar la inspección.
- Evite conducir su vehículo si detecta olor a gasolina, humo o alguna irregularidad mecánica.
- Esté pendiente de la correspondencia oficial o de llamadas por parte de Ford.
Un momento difícil para Ford
Este nuevo retiro se suma a otros desafíos que Ford ha enfrentado recientemente, incluidos problemas con baterías en vehículos híbridos y software de asistencia al conductor.
Además del impacto económico, el retiro masivo podría afectar la reputación de la marca si no se maneja con celeridad y transparencia. Por eso, Ford ha buscado alinear su respuesta con los protocolos exigidos por la National Highway Traffic Safety Administration (NHTSA).
La situación exige responsabilidad tanto por parte del fabricante como de los propietarios.
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