Consumidores de tabaco han disminuido, mientras que los de cigarrillo electrónico van en aumento, según la OMS
Más de 100 millones de personas globalmente utilizan cigarrillos electrónicos, de los cuales al menos 86 millones son adultos y 15 millones niños

Hombre inmerso en una nube de vapor de un cigarrillo electrónico. Crédito: PavelKant | Shutterstock
El número de consumidores de tabaco ha disminuido de 1380 millones en 2000 a 1200 millones en 2024. La reducción relativa desde 2010 ha sido del 27%, según un nuevo informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Sin embargo, el tabaco sigue afectando a uno de cada cinco adultos, causando millones de muertes anuales.
Lejos está el problema de terminar, la tendencia está cambiando y la amenaza emergente son los cigarrillos electrónicos. El aumento del uso del vapeo está aquí.
Más de 100 millones de personas globalmente utilizan cigarrillos electrónicos, de los cuales al menos 86 millones son adultos y 15 millones niños. Esto representa un creciente riesgo de adicción a la nicotina entre los jóvenes.
Los expertos advierten que los cigarrillos electrónicos, inicialmente promovidos como una alternativa más segura, están fomentando una nueva ola de adicción entre los adolescentes, poniendo en riesgo los logros alcanzados en el control del tabaquismo.
Tendencias de género en el uso del tabaco
Las mujeres han superado a los hombres en la reducción del consumo de tabaco, alcanzando el objetivo mundial del 30% cinco años antes de lo previsto. Desde 2010, la prevalencia en mujeres ha caído del 11% al 6.6%.
A pesar de la significativa reducción en el consumo, los hombres no alcanzarán sus objetivos hasta 2031. Actualmente, más del 80% de los usuarios de tabaco son hombres.
Análisis regional del consumo
Asia Sudoriental: reducción notable del consumo masculino, con una disminución del 70% al 37% desde el 2000.
África: la prevalencia más baja, en un 9.5%, con un progreso significativo hacia el objetivo.
Américas y Europa: Efectos mixtos, con avances en algunas áreas mientras persisten desafíos en otras.
Efecto del vapeo en la salud
Los efectos del vapeo en la salud son variados y afectan principalmente a las vías respiratorias, el sistema cardiovascular y otros órganos. Vapear provoca inflamación crónica en las vías respiratorias y los pulmones, puede agravar enfermedades como el asma y la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, y causar tos persistente y dificultad para respirar.
También libera sustancias químicas tóxicas y metales pesados que pueden dañar el sistema cardiovascular, aumentando la presión arterial, la frecuencia cardíaca y el riesgo de infartos y accidentes cerebrovasculares.
Además, la nicotina inhalada puede causar adicción y tiene efectos negativos en el desarrollo cerebral, especialmente en jóvenes. El vapeo también puede provocar daños en la boca y la piel debido a quemaduras o explosiones de los dispositivos y afectar la salud de terceros por exposición pasiva al aerosol.
Efectos respiratorios
- Inflamación crónica de las vías respiratorias y pulmones.
- Agravamiento del asma y enfermedades pulmonares.
- Riesgo de lesiones pulmonares como “pulmón de palomita de maíz” por algunas sustancias aromáticas.
- Síntomas como tos persistente y dificultad para respirar.
Efectos cardiovasculares
- Estrés inmediato en el sistema cardiovascular con aumento del ritmo cardíaco y rigidez arterial.
- Posible endurecimiento de arterias, aumentando riesgo de arritmias, infartos y accidentes cerebrovasculares.
- Síndrome metabólico con riesgo aumentado de enfermedades cardiovasculares y cáncer.
Otros riesgos
- Adicción a la nicotina, especialmente preocupante en jóvenes.
- Daños en la boca: estomatitis, lesiones y enfermedades bucales.
- Lesiones físicas por quemaduras y explosiones de dispositivos.
- Daños en el desarrollo cerebral y motor en hijos de madres que vapean durante el embarazo.
- Exposición pasiva al aerosol que puede afectar la salud de personas cercanas.
Sustancias tóxicas
- Liberación de metales pesados como plomo, cromo y zinc.
- Sustancias químicas cancerígenas como formaldehído, acetaldehído y compuestos volátiles.
- Aromatizantes que dañan membranas celulares y pueden estar relacionados con cáncer y enfermedades cardíacas.
Llamado a la acción
La OMS insta a los gobiernos a fortalecer las políticas de control del tabaco, aumentar impuestos, prohibir la publicidad y regular productos nuevos como los cigarrillos electrónicos. Se requiere de acciones más rápidas y contundentes para combatir la epidemia del tabaco en curso.